A finales del año pasado hablé de que los BYD cargan más lento que sus rivales, y comentaba que esa era probablemente su mayor debilidad frente a las alternativas del mercado. La potencia de carga en corriente continua es una especificación técnica importante, sobre todo, para poder viajar con comodidad. De hecho, también comenté anteriormente que la potencia de carga importa más que la autonomía a la hora de comprar un coche eléctrico u otro. Y ahora, con la nueva e-platform 3.0 EVO, el fabricante chino BYD ha resuelto su mayor carencia.
La e-platform 3.0 EVO de BYD mejora la potencia de carga
Este verano avancé que el BYD Seal 07 estrenaría la e-platform 3.0 EVO, pero aquí en España –y el resto de Europa- hemos tenido que esperar hasta el lanzamiento del BYD Sealion 7 para que eso ocurra. Este modelo, que por cierto es un SUV de tamaño mediano con carrocería coupé, y que está planteado para competir con el Tesla Model Y, es el que estrena la nueva plataforma de la marca. Una plataforma que se basa en la e-platform 3.0 que usan todos los demás modelos que venden aquí, pero viene con una serie de mejoras técnicas relevantes.
Lo más relevante es que este modelo ya soporta carga rápida en corriente continua hasta 230 kW de potencia máxima. Una enorme mejora si consideramos que el BYD Atto 3 llegaba hasta 89 kW como máximo, el BYD Dolphin tenía que conformarse con 88 kW de potencia pico y el BYD Seal, que ya destaca sobre el resto de modelos de la marca, soporta un máximo de 150 kW. Incluso su berlina eléctrica rival del Tesla Model 3, con esos 150 kW de potencia máxima, estaba todavía muy por debajo de lo que ofrecen sus rivales.
Ahora sí es tan rápido como rivales NCM, pero mantienen las baterías LFP
De entre las marcas que compiten con BYD en el mercado de los coches eléctricos, una buena parte de ellas usan baterías con celdas NCM de alto rendimiento para sus modelos de gama alta o versiones deportivas. Y es de sobra conocido que sí, estas baterías tienen una mayor densidad energética y soportan tasas de carga y descarga más elevadas. Pero al mismo tiempo son notablemente más caras y son baterías menos seguras, además de que proporcionan una vida útil más corta.
Y mientras tanto, BYD sigue apostando por las baterías LFP para todos y cada uno de los modelos que tiene disponibles en el mercado. Son además baterías de diseño, desarrollo y fabricación propios. Se trata de baterías que sí, hasta ahora habían permitido una carga más lenta, pero tienen un nivel de seguridad extraordinario, además de una vida útil extensa gracias a una mínima degradación en el uso. Y ya han demostrado que también pueden ofrecer un muy buen nivel de densidad energética.
De momento los modelos antes mencionados –el BYD Dolphin, el Atto 3 y el Seal- siguen quedándose por detrás de sus rivales en cuanto a la potencia máxima de carga. Pero la introducción de la e-platform 3.0 EVO a partir del nuevo Sealion 7, que seguro que irá extendiéndose a otros modelos en el futuro, será la que permita a los usuarios de la marca disfrutar de un sistema de carga notablemente más rápido. Por otro lado, sabemos también que la marca china trabaja ya en la e-platform 4.0, y de nuevo mejorarán también el apartado de la carga rápida. Además, ahora sus nuevos coches eléctricos son compatibles con sistemas eléctricos basados en arquitecturas de 800 V.