Lo de Toyota con sus coches eléctricos está siendo digno de estudio. La marca que presume de ser una de las que más fiabilidad ofrecen del mercado tuvo que retirar del mercado su bZ4X nada más estrenarlo porque se le podía caer una rueda mientras estaba circulando; y después se vio que la autonomía no cumplía con lo prometido. Pues ahora, cuando parecía que ya todo estaba bien, la marca ha tenido un nuevo problema, pero esta ve con el Toyota bZ3, que solo se vende en China y que parecía no tener defecto alguno.
El problema que afecta al Toyota bZ3 es un defecto de fabricación de las manijas de las puertas traseras. Para este coche eléctrico, y después de haber mostrado una autonomía deficiente con el Toyota bZ4X, que es su único coche eléctrico disponible a nivel global, la japonesa decidió aliarse con BYD, que es quien se encarga de ponerle el motor eléctrico y también la batería. Es decir, que para los componentes críticos como coche eléctrico decidieron no arriesgarse y recurrir a un fabricante líder y de referencia. Y con el bZ3 no han tenido problemas en la parte eléctrica, con componentes de BYD, pero han tenido que hacer una llamada a revisión por un defecto de fabricación de otro componente.
Toyota llama a revisión a su mejor coche eléctrico, de nuevo un defecto de fabricación pone su ‘intachable fiabilidad’ en entredicho
El problema en cuestión afecta a unidades fabricadas este año del Toyota bZ3. Recordemos que el sedán eléctrico se presentó en octubre del año pasado, y con la intención de recuperar protagonismo en el mercado asiático, donde Toyota está perdiendo participación a un ritmo preocupante por su pobre apuesta por el coche eléctrico. Es un lanzamiento que, como veníamos comentando, llegó más tarde que el Toyota bZ4X y enfocándose únicamente en China, en lugar de ser también un lanzamiento para el mercado global.
Pues también ha llegado con problemas porque, tal y como se ha podido conocer, Toyota ha emitido una llamada a revisión por un defecto de fabricación en las manijas de las puertas traseras. Por muy ridículo que suene, tratándose de un fabricante con la trayectoria de Toyota, han detectado que las puertas pueden abrirse en marcha o incluso, en casos algo más extremos, podrían quedarse bloqueadas por este defecto de fabricación. La historia, sin duda, recuerda mucho al problema del Toyota bZ4X por el que podría llegar a perder las ruedas mientras estaba circulando de forma totalmente normal.
La llamada a revisión llega apenas tres meses después de su lanzamiento y vuelve a demostrar, una vez más, que a Toyota le están saliendo mal las cosas con los coches eléctricos. Ni siquiera su alianza con BYD les ha salido bien. Aunque hay que reconocer que, al menos por el momento, todo lo que depende de BYD no está dando problemas de ningún tipo y, sin embargo, lo que sí ha llegado defectuoso es lo que depende de la propia marca japonesa. Las afectadas son unas 12.000 unidades, pero es que Toyota tampoco ha tenido mucho más tiempo de avanzar con la comercialización de su modelo antes de encontrarse con este llamativo problema.
Según describen, la forma y el material que se han empleado para estas defectuosas manijas traseras provocan que exista un espacio entre la propia manija exterior de la puerta y la cerradura. Y bajo ciertas condiciones de humedad y temperatura, la cerradura puede no bloquearse, lo que evidentemente supone un importante riesgo por el que han tenido que tomar medidas. La decisión ha sido llamar a revisión a las unidades afectadas, que se cuentan por miles, y reemplazar las partes afectadas de forma gratuita para garantizar el nivel de seguridad adecuado.
