El Renault Clio 2026 se convertirá en la sexta generación del modelo y sí, coexistirá con el nuevo Renault 5 eléctrico, a pesar de que originalmente fue concebido con la posibilidad en mente de convertirse en su sustituto. Tenemos un primer avance de su diseño, e información sobre sus motores -y otros detalles-, y experimentará un radical cambio de diseño.
Tanto es así que el nuevo Renault Clio 2026, de sexta generación, será el encargado de estrenar un nuevo lenguaje de diseño, totalmente diferenciado del actual, que más adelante se irá llevando a otros modelos. Y es algo que sorprende a estas alturas porque todavía estamos viendo cómo algunos modelos se adaptan al lenguaje más moderno, pero los plazos son rápidos ahora mismo en la marca francesa.
Nuevo diseño para el Renault Clio 2026 con un enfoque estético y funcional
Un punto interesante, y clave, en el rediseño del Renault Clio para su próxima generación, es que se convertirá en un modelo ligeramente más largo para ofrecer una mayor habitabilidad interior, y al mismo tiempo se aprovechará para reducir la altura de la carrocería. Es decir, no se trata solo de una actualización estética, sino que el cambio de diseño tiene un enfoque funcional.
El interés en aumentar la habitabilidad tiene que ver con la llegada de los eléctricos, todos ellos más amplios en su interior por la falta de motor térmico en el frontal, y una mayor distancia entre ejes. Y esa carrocería más baja persigue un mejor coeficiente aerodinámico que el de la generación actual para lograr una mayor eficiencia, con un consumo y unas emisiones inferiores.
Toda esta información, y el avance de diseño, se basan en lo que ya se ha podido ver en las primeras fotos espía del modelo en desarrollo. Vamos, que es información fiable. Y, por cierto, aunque del interior se sabe menos, sí conocemos ya que dispondrá de dos grandes pantallas unidas en un módulo, para el cuadro de instrumentos digital y el sistema multimedia. Y un selector del cambio automático en forma de palanca, en el lado derecho del volante.
Grandes cambios también a nivel de mecánica, y versión eléctrica
Fuera del avance de la nueva generación a nivel de diseño, la parte mecánica también cambiará en gran medida. Ya se confirmó algún tiempo atrás que la próxima generación pondrá punto y final a los motores diésel, que no es algo que sorprenda en absoluto, y también pudimos saber que Renault está trabajando en que exista una versión eléctrica en paralelo.
Respecto a la versión eléctrica hay algunas dudas. Porque, si bien es cierto que la plataforma AmpR Small guarda pocas diferencias técnicas con respecto a la CMF-B, siendo la primera específica para eléctricos y la segunda para térmicos, en Renault no cuentan con las mismas facilidades técnicas de que disponen en Stellantis. Y esto es, sencillamente, porque no disponen de una plataforma única, multi energía, que les simplifique el desarrollo de un modelo idéntico con versiones térmicas y eléctricas.
Se espera, aunque no es algo confirmado de manera oficial aún, que exista una versión eléctrica del modelo y se mantengan las versiones térmicas. Usando, como te digo, ambas plataformas que tiene disponibles la marca francesa. Las que llegarán seguro son las versiones térmicas, y de estas lo que sabemos es que la gama partirá sobre el 1.2 TCe MHEV de 115 CV, con el 120 CV GLP justo por encima, y el nuevo motor híbrido de 160 CV del Dacia Bigster.