Con 230 CV de potencia, el MINI John Cooper Works Challenge es una edición especial, tan especial que sólo existirán 100 unidades y no llegarán más allá de Reino Unido, de donde es original la marca del Grupo BMW. Y vale que la cifra de potencia no es un escándalo, ni lo es su motor de cuatro cilindros con 2.0 litros de cubicaje, pero sí lo es en conjunto con otra serie de mejoras que lo hacen específico para circuito.
Sólo 100 unidades del MINI John Cooper Works Challenge, y para Reino Unido
El MINI John Cooper Works Challenge está planteado para circuito, como comentábamos, y cuenta con un cuatro cilindros de 2.0 litros que desarrolla 230 CV de potencia con 320 Nm como par máximo. El 0 a 100 km/h, con las cifras anteriores, lo resuelve en 6,3 segundos y ayudado por una mejora realmente importante, y es que cuenta con los neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2 y nuevos muelles y amotiguadores Nitron. Así que sí, la experiencia de conducción va un pasito más allá de lo que ofrece un JCW a secas.
Pero además de lo anterior hay que añadir también el diferencial de deslizamiento limitado, de Quaife, sobre el cual se saca el máximo partido gracias a la gestión electrónica del MINI John Cooper Works Challenge para un agarre óptimo tanto en el frenado como en la aceleración. Y es que gracias a esta configuración mecánica se transfiere la potencia en favor de la rueda delantera con menor agarre. Pero también hay que contar con nuevas llantas de aleación que reducen en 1,5 kg el peso final, y los neumáticos anteriormente mencionados que también ayudan a reducir en 1 kg menos por cada cual. Se han añadido nuevos frenos de mayores prestaciones, escape de competición y otras mejoras, como el interior en fibra de carbono con tonos negros de contraste, así como la numeración de la unidad de estas sólo 100 que se van a producir.