Citroën está replanteando su estrategia como marca, y el Citroën C3 es quizá su primera pieza. Thierry Koskas, director general de la marca, ha asegurado que van a dejar de apostar por los nichos y se centrarán en los segmentos principales. Con ello ha querido referirse a que cancelarán sus modelos más grandes para centrarse en el Citroën C3 como su opción más pequeña, dentro del segmento B, y apostarán también por el segmento C con el Citroën C5 Aircross como su modelo más grande.
La marca francesa estrenó recientemente el Citroën C3 como alternativa al Dacia Sandero, que ya sabemos que es el coche más vendido en Europa, a pesar de que justo ahora ha caído en España y precisamente ha sido a manos de un modelo de Citroën. Como te iba contando, el nuevo C3 es un primer paso de la marca francesa en su intención por apostar por modelos de gran volumen. Hasta ahora habían tenido opciones más pequeñas como el Citroën C1, que desapareció hace ya tiempo; y también opciones más grandes como el Citroën C5 X, que se mantiene todavía a la venta y ‘no está funcionando mal pero está en un segmento que no existe’, según el propio director general de Citroën.
No habrá coches más pequeños que el Citroën C3, ni más grandes que el C5 Aircross, y tampoco se apostará de lleno por los eléctricos
Así que por un lado ha querido dejar claro que se centrarán en los segmentos principales abandonando así los utilitarios del segmento A, y también los modelos por encima del segmento C. Aunque el C5 X está a la venta, esto deja claro que no habrá sustituto para él y tampoco veremos ningún nuevo modelo con unas dimensiones similares. Y sí, vale que por debajo del Citroën C3 está el pequeño Citroën AMI, pero este producto es un ‘caso aparte’ que ni siquiera es un turismo.
Estos días atrás hemos visto que Stellantis lanzará más híbridos, en lugar de enfocarse de lleno en los eléctricos, y en estas nuevas declaraciones del director general de Citroën hemos podido saber que la marca francesa seguirá fabricando modelos con motor de combustión interna e híbridos. Sobre todo, porque con esta filosofía de ‘marca popular’ necesitan ofrecer movilidad asequible para todos, aunque su objetivo es que la mayor parte de las ventas en 2030 sean de coches eléctricos.
La idea detrás de estos dos puntos clave, el de simplificar la gama en torno a los segmentos B y C, y de no hacer una apuesta completa por los coches eléctricos, está motivada por el objetivo de Citroën de perseguir la rentabilidad. Respecto a un posible coche más pequeño que el C3, Koskas ha señalado que no hay intenciones de hacerlo porque la gente esperaría ‘pagar menos por él que por el C3, y los costes de producción serían los mismos’ en un coche de tamaño más compacto.
El mes pasado, desde Stellantis presumieron de la flexibilidad mecánica que tienen gracias a su plataforma CMP, que tiene una configuración multi energía compatible tanto con motores gasolina como con sistemas mild hybrid e híbridos, y también con motores eléctricos. Y la nueva plataforma Smart Car que ha estrenado Citroën con el C3, y ha extendido al C3 Aircross, hereda exactamente la misma ventaja. Y es lo que les va a permitir seguir vendiendo modelos gasolina, o gasolina electrificados, en paralelo a sus lanzamientos totalmente eléctricos.