España depende de Europa, sus decisiones y sus plazos, también en esto. Es decir, que el coche eléctrico será obligatorio en España desde el año 2035, tal y como ha establecido la Unión Europea para todos los países miembros. Ahora bien, es una afirmación con matices, porque la obligatoriedad afecta a los coches nuevos. La norma establece que solo se podrán vender coches nuevos de cero emisiones, luego totalmente eléctricos –o de pila de combustible-, pero es algo que no afecta a los coches que ya estén en circulación.
La regulación que establece el fin de la venta de coches nuevos de combustión, en la Unión Europea, para el año 2035, se aprobó por el Consejo de la Unión Europea de manera formal el día 28 de marzo de 2023, y después de que se llegase a un primer acuerdo en octubre de 2022. Esta normativa se recoge en el Reglamento (UE) 2023/851 del Parlamento Europeo y del Consejo Europeo.
La transición hacia el coche eléctrico en España ¿Cuándo será obligatorio?
El matiz más importante, y por el que hay que empezar: no tendrás obligación de cambiar tu coche actual por uno eléctrico. La regulación ya establecida, como te he dicho antes, prevé que a partir del año 2035 esté prohibido vender coches nuevos que no sean cero emisiones. Esto quiere decir que desde el año 2035 las marcas de coches solo podrán vender eléctricos. Y es cuando, por error, la mayoría de la gente cree que el coche eléctrico será obligatorio en España. Y sí, será obligatorio, pero solo para las marcas de coches y quienes quieran comprar un vehículo nuevo.
Fuera de esto, España, igual que el resto de países de Europa, está ya en un período de transición hacia el coche eléctrico. Europa lleva años estableciendo y endureciendo progresivamente la normativa contra las emisiones contaminantes que regula los coches nuevos, de modo que estos vehículos nuevos que se venden son cada vez menos contaminantes, pero siguen usando –no todos, claro- motores térmicos. Además se están usando otras medidas de transición como beneficios fiscales para clientes que compren coches más ecológicos, ayudas directas e indirectas, etcétera.
La realidad sobre la obligatoriedad del coche eléctrico en España
Como te he dicho antes, el cambio llegará en el año 2035, y no solo a España sino a toda Europa. Ese es el año en el que la Unión Europea ha establecido que tan solo se podrán vender coches nuevos de cero emisiones. Y esto quiere decir que tan solo afectará a los vehículos nuevos que salgan al mercado, pero no afectará a los que ya estén en circulación. Por lo tanto, si antes de esa fecha tienes un coche de combustión podrás seguir utilizándolo. Ahora bien, hay otras medidas también para regular precisamente esto.
Igual que hay normas que están tratando de estimular e incentivar la transición hacia el coche eléctrico, también hay algunas normas en paralelo que están tratando de desincentivar la propiedad y uso de coches de combustión. Por ejemplo las ZBE, o Zonas de Bajas Emisiones, en los núcleos de población, que regulan la circulación de vehículos según la etiqueta ambiental de la DGT.
Por otro lado, la normativa contempla algunas flexibilidades. Cabe la posibilidad de que se permita la venta de vehículos que funcionen con combustibles sintéticos, siempre y cuando sean neutros en carbono. El problema aquí es que esta tecnología, y los coches de hidrógeno, no están recibiendo una inversión significativa por parte de los fabricantes de automóviles. Es por eso que no se espera que prosperen de una forma mayoritaria. Por otro lado, los pequeños fabricantes de automóviles que vendan menos de 1.000 vehículos al año podrán solicitar excepciones a la normativa.
Las Zonas de Bajas Emisiones y otras medidas para la transición energética
Como te decía antes, las Zonas de Bajas Emisiones ya están afectando a la movilidad en España. Las ciudades españolas que cuentan con más de 50.000 habitantes están ya implementando estas áreas en las que se limita la circulación a los vehículos considerados como más contaminantes. Esta medida trata de ‘desplazar’ a los vehículos contaminantes de las zonas más pobladas, para reducir la contaminación en estas áreas y para desincentivar el uso y la propiedad de este tipo de vehículos con tecnologías menos actuales y menos respetuosas con el medio ambiente.
También hay en funcionamiento medidas para incentivar la transición hacia el coche eléctrico. Por ejemplo el tan conocido Plan MOVES, que prevé subvenciones para la compra de coches eléctricos y para la instalación de puntos de recarga para este tipo de vehículos. También existen beneficios fiscales sobre el Impuesto de Matriculación, bonificaciones en el Impuesto de Circulación, y ventajas como condiciones especiales en las zonas de estacionamiento regulado.