A medida que la adopción del coche eléctrico continúa creciendo, la energía solar es cada vez más interesante. Por eso está creciendo la instalación de placas solares en viviendas. Sin embargo, no todos pueden poner paneles solares en casa porque tienen un piso, o porque viven de alquiler. Y existe una solución muy fácil, y bastante más barata, que son los kits solares sin instalación. Como el que nos ocupa, que viene preparado para solo conectar a un enchufe normal y corriente, de los de casa, y con eso ya es suficiente para bajar la factura de la luz cada mes.
Tienes el SunneSolar de 405 W, que es la versión más sencilla y cuesta 543 euros en estos momentos; y también está el SunneSolar de 510 W, que sube de precio hasta los 649 euros. Los dos son kits solares sin instalación pensados para terrazas y balcones, para su instalación en cualquier zona iluminada. Vienen con su correspondiente panel solar, que puede ser de 405 W ó 510 W en función del pack que escojamos, además de su correspondiente microinvesor ENPHASE, el cableado y los conectores. De hecho, lleva un cable de 3 metros para que no tengamos problemas al conectar nuestro kit solar sin instalación donde más nos convenga.
Un kit solar sin instalación es la opción más barata y versátil para bajar la factura de la luz en casa, y no son caros
SunneSolar no es ni mucho menos la única empresa que hace kits solares sin instalación, pero sí una de las más reconocidas. Hay otras muchas opciones como los kits PowerStream de EcoFlow, por ejemplo. Y en el caso de EcoFlow, eso sí, es verdad que pueden llegar a ser todavía más interesantes porque se pueden configurar a medida con diversas opciones y, además, se puede incluir una batería doméstica para reducir aún más el consumo energético en la vivienda. Pero son bastante más caros que los kits solares plug&play de SunneSolar.
Una de las cosas más atractivas de los kits solares sin instalación es que son la forma más fácil y rápida de ahorrar en la factura de la luz con energía fotovoltaica. Lo que tardes en pedirlo, y en que te llegue a casa, es lo que vas a tardar en conectarlo a una toma de corriente convencional, un enchufe cualquiera de casa, y empezar a inyectar energía gratis en la vivienda. Como mucho, puedes tardar unos minutos en fijar el panel al balcón o a la terraza, pero vienen preparados también para simplificar este proceso.
Otra importante ventaja es que este tipo de instalaciones son más baratas y conllevan menos trámites. Pero es que además son compatibles con pisos y, sobre todo, son la opción perfecta si vives de alquiler. Una instalación fija no se puede mover, pero uno de estos kits solares sin instalación se pueden ir contigo y cambiar de casa sin suponer ningún tipo de complicación. Aunque, eso sí, la producción de energía fotovoltaica nunca va a ser tan grande como con una instalación convencional de placas solares en la vivienda.
Además de los dos modelos de SunneSolar a los que hacemos referencia en este artículo, y el interesante kit configurable de EcoFlow, hay otras muchas opciones posibles. Por ejemplo, en Leroy Merlin tienen sus propios kits. Y si queremos conseguir más potencia, y con ello un mayor ahorro en la factura de la luz, es una opción a tener en cuenta porque tienen un modelo con 700 W. Va algo más allá de lo que ofrece incluso el SunneSolar de mayores prestaciones aunque, eso sí, su precio es de 1.090 euros. También es más caro, como es evidente.
