La compra venta de vehículos usados y de ocasión está ganando mucho terreno a la adquisición convencional. Hay muchos factores económicos, sociales y tecnológicos que invitan a cada vez más conductores a tomar esta decisión. La visita a centros especializados como el concesionario de coches de segunda mano en Pamplona Inniauto es la tónica habitual entre quienes quieren cambiar de vehículo o buscan su primer modelo.
Los motivos que han cambiado la idea acerca de la adquisición de un coche son varios y van desde la perspectiva económica, pues la segunda mano es más barata y rentable; hasta el contexto actual, marcado por una transición inacabada hacia la tecnología eléctrica. Por un lado, el coche usado sale más barato. A simple vista, este punto es evidente, ya que el precio es inversamente proporcional al número de kilómetros. Cuánto más recorrido lleva el coche, más se reduce su valor de mercado. En lo qué habría que incidir es en la rentabilidad de la inversión y ésta es bastante óptima cuando se busca un modelo de segunda mano. El coste por kilómetro, hasta el fin de la vida útil, es menor si se recurre al mercado de ocasión en comparación con la oferta de nueva Un coche que todavía no ha circulado, una vez sale del concesionario, baja su valor entre un diez y un veinte por ciento.
Otra de las ventajas de comprar un vehículo de segunda mano es que abre más posibilidades al cambio de modelo con una cierta frecuencia y esto permite al conductor estar sujeto a una continua actualización de las mejoras tecnológicas y de prestaciones que se producen en la industria automovilística. El cambio de vehículo es más sencillo cuando se acude a este mercado, ya que el gasto inicial es mucho menor y esto aporta más margen al cambio. Permite, además, conocer diferentes marcas y modelos de conducción diferentes. De hecho, muchos conductores, sean noveles o experimentados, buscan un modelo usado como fase previa y a modo de preparación, antes de realizar una inversión mayor.
El paso a lo eléctrico está en una fase temprana
La tecnología es otro factor que justifica, hoy en día, la preferencia por un vehículo de segunda mano. La investigación en los modelos eléctricos e híbridos todavía tiene mucho recorrido por delante y esto lleva a un alto porcentaje de conductores a actuar con cautela y paciencia. Resulta un tanto arriesgado invertir mucho dinero en un coche nuevo, ya que el siguiente gran paso en el sector puede estar muy cerca y nuestra adquisición podría no contar con los últimos avances. La tecnología eléctrica, además, tiene todavía muchos cabos sueltos en lo referente a la autonomía de los vehículos, el tiempo de carga o la duración de las baterías; sin olvidar el aspecto social que hace referencia a que hay muchas zonas en España con una escasez de estaciones eléctricas; lo que suponen obstáculos que todavía deben ser resueltos. Es una inversión muy alta como para correr este riesgo, así que la opción de comprar un coche de segunda mano es una buena y rentable elección en el contexto actual.