Ahora mismo los coches eléctricos que se venden pueden contar con dos opciones de batería. Es posible que vengan con baterías NCM, que usan níquel y cobalto y tienen una alta densidad energética; o que usen baterías LFP a partir de litio ferrofosfato. Estas segundas son bastante más baratas y, aunque con una densidad energética menor, pueden garantizar una mayor vida útil por su alta resistencia a los ciclos de carga y descarga, y son bastante más seguras. Pues bien, CATL, el mayor fabricante de baterías para coches eléctricos a nivel mundial, va a desplegar ya sus nuevas baterías M3P que no son ni LFP ni NCM, sino unas nuevas baterías LMFP.
¿Y qué hay de interesante en estas baterías? Que son prácticamente tan baratas como las baterías LFP, pero su innovadora química cuaternaria que añade manganeso a la química ternaria de las ‘litio ferrofosfato’ hace que tengan unas prestaciones parecidas a las NCM. Es decir, que en cierto modo mezclan lo mejor de ambas alcanzando una densidad energética de 230 Wh/kg. Que, para que te hagas una idea, es bastante más que los 150 Wh/kg de una batería LFP típica y se queda bastante cerca de los 265 Wh/kg de una batería NCM de altas prestaciones. Y como decíamos, a nivel de precio están bastante más cerca de las baterías LFP que de las baterías NCM.
CATL introduce la sucesora de la batería LFP, sus nuevas baterías M3P con química LMFP son baratas y con una alta densidad energética
Según informan, CATL ha resuelto ya el mayor problema que tenía con esta nueva química de celdas de batería que era su vida útil algo limitada. Al parecer, la compañía se ha servido de materiales dopantes que resuelven la degradación prematura de las celdas para que sus baterías M3P puedan tener una mayor vida útil, cercana a los valores en los que se mueven las ya conocidas celdas LFP y NCM. Así que las nuevas baterías con química LMFP ya están listas para aumentar su producción y, efectivamente, producirse a la escala masiva que necesita el mercado del coche eléctrico.
La producción en masa de este nuevo tipo de baterías arrancará a finales de 2023, sin una fecha específica que hayan revelado, y son baterías que van a permitir el lanzamiento de coches eléctricos con 700 km de autonomía aproximada, pero con unos costes de producción notablemente inferiores frente a las baterías NCM. La intención de CATL, al parecer, es que estas nuevas baterías M3P con química LMFP sustituyan a las baterías LFP. Es decir, que se conviertan en la nueva opción de batería barata, pero con una autonomía bastante superior a la que es capaz de alcanzar una batería LFP actual.
Teniendo en cuenta que la producción en masa de estas nuevas baterías dará comienzo a finales de este año 2023, deberíamos ver nuevos coches eléctricos con ellas desde comienzos de 2024, en algún momento durante la primera mitad del año. El año pasado pudimos saber que Tesla usará baterías M3P de CATL próximamente, y desde luego la firma china no es la única que está trabajando en esta química. También NIO trabaja en baterías LMFP desde hace algún tiempo por la sustancial mejora en términos de densidad energética sin perjudicar de forma notable al precio de las baterías.
Todavía hay mucho por conocer sobre las baterías LMFP como nueva química a nivel de celda, y específicamente sobre las baterías M3P de CATL. Ahora bien, hace algún tiempo que se comenta que podrían ser el perfecto sustituto de las actuales baterías LFP. Y esto es realmente importante, porque poco a poco estamos viendo cómo las LFP se imponen sobre las baterías NCM a pesar de que estas últimas tienen una densidad energética bastante más alta. A fin de cuentas, el precio es un aspecto crítico en el sector del coche eléctrico y, además, las baterías LFP garantizan una vida útil bastante más extensa. Eso, y que son mucho más seguras.