El MG S5 encaja en la gama de MG como reemplazo del anterior MG ZS EV, como SUV de tamaño compacto con una carrocería de 4,47 metros de largo –ver medidas–, y compite con opciones como el Skoda Elroq, el BYD Atto 3 o el Leapmotor B10 entre otros. En cualquier versión, solo con tracción trasera y un único motor, aunque en dos versiones de potencia y, además, dos versiones de batería.
Si se configura con 170 CV va de la mano de una batería LFP de 49 kWh de capacidad bruta, pero son 47,1 kWh útiles. La otra versión del modelo tiene 231 CV de potencia máxima y una batería NCM de 64 kWh brutos y una capacidad útil de 62,1 kWh. Es importante atender a esta diferencia de química en las celdas de la batería de una versión y la otra.
Dos potencias, dos baterías de diferente capacidad y química
La configuración base del modelo usa batería LFP –de menor coste- con menor capacidad de almacenamiento energético. Esta versión da una autonomía real de 195 a 415 kilómetros, en función del uso por autopista o ciudad y dependiendo de la temperatura y uso del climatizador. Con 195 kilómetros de autonomía real mínima, quedándose por debajo del umbral de 200 kilómetros, se considera que a priori es algo justo para poder viajar con cierta comodidad.
| Condición | Autonomía (km) |
|---|---|
| Ciudad, clima templado | 415 |
| Autopista, clima templado | 255 |
| Mixto, clima templado | 320 |
| Ciudad, clima frío | 275 |
| Autopista, clima frío | 195 |
| Mixto, clima frío | 235 |
| Clima frío: -10 ºC y usando la calefacción. Clima templado: 23 ºC y sin A/C. | |
Esta configuración base soporta 120 kW de potencia máxima de carga, y anuncia una carga del 10% al 80% en 24 minutos. Son cifras buenas para una versión que, por autonomía, está ciertamente más limitada. Para que nos hagamos una idea, esta versión de acceso a la gama tiene una autonomía WLTP de 340 kilómetros, lo que significa que con esa carga de 24 minutos recuperaríamos alrededor de 238 km.
En base a lo anterior, si bien es cierto que de autonomía va algo justo, con su sistema de carga rápida compensa de forma destacable esa carencia. No es un sistema de carga rápida extraordinariamente veloz, pero sí lo suficiente como para que viajar sea mucho más cómodo, al menos, para hacerlo de forma esporádica.

La versión más alta de gama, sin embargo, tiene ya una batería NCM que, además, sube de capacidad hasta los 62,1 kWh útiles. Gracias a esta diferencia puede ofrecer una autonomía real de entre 255 y 540 kilómetros, con una holgura suficiente como para poder viajar cómodamente. En este caso sí que hay una importante diferencia respecto a los 200 km mínimos para viajar, y además también ofrece una carga más rápida.
| Condición | Autonomía (km) |
|---|---|
| Ciudad, clima templado | 540 |
| Autopista, clima templado | 330 |
| Mixto, clima templado | 415 |
| Ciudad, clima frío | 360 |
| Autopista, clima frío | 255 |
| Mixto, clima frío | 305 |
| Clima frío: -10 ºC y usando la calefacción. Clima templado: 23 ºC y sin A/C. | |
Esta versión tiene más batería, tiene también más potencia en su sistema de tracción, y eleva la potencia máxima de carga de su sistema hasta los 139 kW. Con esto puede cargar del 10% al 80% en 28 minutos. Que, aunque a priori puede parecer una peor cifra que en la configuración de batería pequeña, en realidad es notablemente mejor. Entre otras cosas, gracias al uso de una batería con química NCM.
En esta versión del MG S5 la autonomía WLTP asciende también de forma notable hasta los 465 kilómetros, de modo que con esa carga de 28 minutos estaríamos recuperando alrededor de 325 kilómetros. La cifra de autonomía real en cualquier circunstancia, junto al ritmo de su sistema de carga rápida, hacen que esta variante del modelo sea mucho más recomendable para quienes tengan idea de viajar con cierta frecuencia y busquen la máxima comodidad.
Para que se entienda la comparación, el MG S5 de 49 kWh recupera 9,9 km/minuto con su sistema de carga rápida en la horquilla entre el 10% y el 80% del SoC, mientras que la versión de 64 kWh recupera 11,6 km/minuto.

