El Dacia Sandero se ha convertido en el coche más vendido en España y, además, lleva números de ventaja sobre los siguientes. Y la clave de su éxito está en que es un coche barato, pero con unas prestaciones muy correctas para la categoría en la que compite. Es un subcompacto del segmento B, como lo pueden ser un SEAT Ibiza o un Hyundai i20, pero es incluso más barato que un utilitario. Ahora bien, ‘no es oro todo lo que reluce’, y en el Dacia Sandero también tiene un problema que es importante conocer antes de lanzarse a comprarlo.
Si entramos en el configurador del Dacia Sandero nos encontraremos con que se anuncia a un precio de 13.190 euros, de lo más barato que se puede comprar a día de hoy. Pero este es un ‘precio reclamo’, y no es lo que acabaremos pagando, sobre todo, porque esta configuración viene sin equipamiento crítico e imprescindible para cualquier conductor. Este precio corresponde al acabado Essential, y la realidad del mismo es que viene sin aire acondicionado, así que ya tenemos que empezar desde el principio sumando el importe correspondiente a este equipamiento que, a estas alturas, es ridículo que no venga ya incluido de serie.
No, el Dacia Sandero no es una compra recomendable en su versión más barata porque viene hasta sin aire acondicionado
Por muy atractivo que resulte, olvídate del precio de 13.190 euros al que se anuncia el Dacia Sandero, porque ya de base le vamos a tener que sumar lo correspondiente al aire acondicionado, que en el configurador de la marca tiene un coste de 440 euros. O bien podemos hacer algo mejor, que es olvidarnos del acabado Essential, que viene con un equipamiento de serie ridículo, y optar directamente por el acabado Expression, que es el siguiente en su lista de versiones y ya sí que viene con lo mínimo.
Pasándonos al acabado Expression, el precio base ya es de 14.040 euros. Que sigue siendo un precio excelente para un modelo dentro de esta categoría, pero ya hace que el Dacia Sandero sea notablemente más caro. Esta versión, al menos, ya viene con aire acondicionado de fábrica, y además cuenta con pantalla multimedia de 8 pulgadas, asiento regulable en altura y profundidad, y sistema de ayuda al aparcamiento trasero mediante sensores. Y lo ideal sería que aquí se acabasen los problemas, pero la realidad es que no, sino que tenemos que seguir configurando nuestro Dacia Sandero con bastante precaución.
En el Dacia Sandero tenemos el motor 1.0 TCe de 90 CV de potencia máxima como configuración básica, y es un motor sin electrificación que tiene la etiqueta C de la DGT. No es mala opción si no vamos a pisar la ciudad, pero lo más recomendable en un subcompacto es contar con la etiqueta ECO de la DGT. Y para eso, Dacia, en lugar de optar por un motor con tecnología mild hybrid, se decanta por una mecánica bifuel. Es decir, un motor compatible con gasolina y GLP, que es el 1.0 ECO-G de 100 CV. Pues entonces, todo resuelto ¿no? No, todavía no.
Este es el motor más recomendable para el Dacia Sandero por la etiqueta ECO de la DGT, pero implica otros 600 euros extra, y ya nos hemos puesto en 14.640 euros de la mano del acabado Expression, y tiene el importante problema de que consume bastante. Hablamos de un subcompacto, y según su configurador y usando cifras del ciclo de homologación WLTP, registra un consumo medio combinado de 6,8 L/100 km, que no es poco. Sigue siendo en este punto un coche barato, sí, pero ya no tanto –un Hyundai i20 cuesta menos de 15.000 euros-, y tiene un alto gasto de gasolina en relación a lo que ofrecen rivales directos.