Otra de las novedades que nos traerá el Salón de Ginebra vendrá de la mano de los británicos de Bentley que se encuentran ultimando el desarrollo de sus nuevos Bentley Continental GTC y Bentley Flying Spur. Hemos podido cazar ambos modelos en las heladas carreteras nórdicas mientras se comparaban con la competencia: el Mercedes Clase S y el Mercedes Maybach.
Hablemos primero del Bentley Continental GTC, la versión descapotable de la gama Continental. La marca perteneciente al grupo VAG ha optado en esta nueva generación por utilizar la plataforma MSB desarrollada por Porsche, consiguiendo una notable reducción de peso.
No hay diferencias significativas respecto al Bentley Continental GT más allá de las propias y necesarias para la creación de la versión sin techo. Aparentemente tanto los paragolpes como las ópticas y algunos paneles de la carrocería no muestran diferencia alguna.
En la vista lateral incluso podemos observar la inscripción 12 correspondiente a la motorización que se esconde bajo el capó y que hace referencia al W12 de 6.0 litros, 635 cv y 900 Nm de par asociado a una caja automática de ocho velocidades.
El Bentley Continental GTC se beneficia de la nueva arquitectura de 48 voltios que permite la introducción de las estabilizadoras activas así como suspensión neumática con triple cámara, idéntica a la vista tanto en el GT como en el Porsche Panamera. Junto con el ahorro de peso redundará en un mayor confort de marcha pero al mismo tiempo, unas mayores prestaciones en zonas de curvas.
Bentley Flying Spur cara a cara con sus rivales
Al mismo tiempo también hemos podido cazar uno de los prototipos del futuro Bentley Flying Spur, el cual se rumorea que llegará a finales de este año y que en las fotos cuenta con un profundo camuflaje que esconde perfectamente cuál será el diseño final por lo que no hay que fiarse en las líneas angulosas que luce sobre la nieve.
Construido también sobre la plataforma de Porsche, sus formas serán más cercanas a las del actual Bentley Bentayga que a las del Continental GT. De hecho se rumorea que el motor que equiparía sería el W12 de 5.950 cc utilizado en el SUV británico y que erogaría una potencia por encima de los 600 cv. Al mismo tiempo, es más que probable que la hibridación llegue también en alguna de sus variantes.
Como curiosidad, Bentley ha querido enfrentar en las gélidas carreteras su futuro Bentley Flying Spur contra dos pesos pesados de la categoría: Mercedes Clase S y el Mercedes Maybach. Ambos serán rivales directos cuando llegue a las carreteras.