El sistema de frenada regenerativa en coches eléctricos, y electrificados –híbridos e híbridos enchufables- aprovecha la energía cinética del vehículo –su propio movimiento- para convertirla en energía eléctrica y, de este modo, cuando el vehículo está en retención o deceleración, cargar las baterías. Es decir, que es un sistema de frenada que carga de energía eléctrica las baterías de un coche eléctrico, híbrido o híbrido enchufable. Pero veamos cómo funciona y cómo se utiliza.
En un coche eléctrico, un híbrido o un híbrido enchufable hay un motor eléctrico conectado al eje. Los motores eléctricos pueden funcionar en dos direcciones; y cuando lo hacen en dirección inversa a la de circulación, es cuando entra en funcionamiento el sistema de frenada regenerativa. Esto ocurre porque, cuando se deja de acelerar, o cuando se pisa el pedal de freno, de forma automática e instantánea el motor eléctrico se convierte en generador para aprovechar la energía cinética –la energía producida por el movimiento- y convertir esta energía en energía eléctrica. Esa energía eléctrica se envía mediante el inversor de corriente a la batería del coche eléctrico. Y el resultado es sencillo: la batería del coche se carga cuando frenamos.
Qué es la frenada regenerativa y cómo funciona para cargar la batería del coche al frenar
El sistema de frenada regenerativa se puede encontrar en vehículos eléctricos, en híbridos, en híbridos enchufables e incluso en los mild hybrid. En los vehículos electrificados es capaz de aumentar la autonomía de circulación en modo eléctrico, mientras que en los mild hybrid es capaz de reducir el consumo de combustible de forma notable. ¿Por qué? Porque en las frenadas se carga la batería de 48V, y en aceleración esta energía eléctrica es utilizada para reducir el uso del motor térmico.
Esta frenada regenerativa es la que permite no solo aumentar la autonomía, sino también gastar menos los frenos de un coche eléctrico. El funcionamiento es tan sencillo como que, en tanto que el motor eléctrico puede funcionar en los dos sentidos, cuando lo hace a la inversa se convierte en un generador de corriente eléctrica. Así que, aprovechando la energía cinética, se genera el movimiento en dirección contraria y, mediante el inversor de corriente, se produce la carga de la batería del coche eléctrico. Y esto es eficiente, sobre todo, en circulación urbana. Al producirse más paradas, el sistema de frenada regenerativa consigue más energía para cargar la batería del vehículo.
La eficiencia del sistema de frenada regenerativa depende de la potencia del motor eléctrico y también de la eficiencia del inversor de corriente del coche eléctrico. Además, consiguen más energía eléctrica de las frenadas los coches eléctricos que tienen dos motores eléctricos, uno de ellos conectado a un eje y el otro conectado al otro eje. Por eso, aunque muchos vehículos cuentan con la tecnología de frenada regenerativa, algunos consiguen un mayor nivel de eficiencia energética que otros.