CATL, uno de los principales fabricantes de baterías para coches eléctricos en todo el mundo, ha anunciado sus nuevas baterías Qilin. Se trata de su nueva generación de baterías CTP –Cell To Pack-, que vienen empaquetadas en módulos. Solo por las particularidades de este diseño ya tienen un mejor aprovechamiento del espacio. Pero en esta tercera iteración, CATL ha llegado a 250 Wh/kg de densidad energética gravimétrica para alcanzar los 1.000 km de autonomía, entre otras importantes mejoras.
Las baterías Qilin de CATL son su tercera generación de baterías CTP. Esta tercera generación estará disponible en dos tipos de química distinta: de tipo NCM y de tipo LFP. Las primeras llegan hasta los 250 Wh/kg, y las segundas alcanzan hasta los 160 Wh/kg. Este nivel de densidad energética gravimétrica supone un sustancial avance frente a la generación anterior, de modo que prometen ofrecer 1.000 kilómetros de autonomía.
Por diseño, las baterías CTP ya ofrecen un mejor aprovechamiento de su volumen. En el caso de las Qilin, de CATL, un 72% del volumen de la batería cuenta con material activo. Esto quiere decir que un 72% del volumen total de la batería está compuesto por celdas para el almacenamiento de energía eléctrica. Y para comprender mejor este dato es clave recordar que la primera generación solo aprovechaba un 55% del volumen de la batería. Evidentemente, la mejora es sustancial solo en términos de aprovechamiento del propio espacio.
Pero además de todo esto, el fabricante de baterías anuncia unos tiempos de recarga impresionantes para su tercera generación de baterías. Ya permiten pasar de un 10% a 80% de carga en tan solo 10 minutos. Pero están trabajando en una mejora que permitirá llegar al 80% en 5 minutos. Y por si esto fuera poco, está prevista otra mejora para alcanzar una densidad energética de 330 Wh/kg. Respecto a su iteración más reciente, la de baterías Qilin que nos ocupa, esto supondría un incremento del 32%.
Pero ¿cómo lo van a conseguir? Siendo uno de los fabricantes de baterías líderes de la industria, CATL dedica grandes cantidades de recursos a I+D. En su portal repasan hacia dónde apuntan sus investigaciones y están trabajando en una ‘super red electrónica’ para mejorar la velocidad de respuesta del cátodo a la carga. Pero además, también están trabajando en un separador de alta porosidad que reduce la resistencia a la transmisión y acorta la distancia de la misma, así como en electrolitos superconductores. Estas son tan solo algunas de las tecnologías que tienen en desarrollo.
Para su generación más reciente de baterías, en sus dos químicas posibles, han trabajado especialmente en el sistema de refrigeración líquida. Con importantes optimizaciones sobre este sistema se ha podido acelerar la carga y, efectivamente, lograr un tiempo de tan solo 10 minutos para llegar al 80%. Estas nuevas baterías tienen cuatro veces más superficie de transferencia de calor gracias a la colocación de elementos de refrigeración entre celdas vecinas, que ayudan a disipar el calor que generan las celdas.