Hace algún tiempo que se viene hablando de un restyling del Dacia Spring que servirá para introducir una fuerte mejora a nivel de tecnología en su interior, así como una batería de más capacidad de almacenamiento energético para alcanzar una mayor autonomía. Todo pintaba tan interesante que, de repente, por sorpresa, ha llegado el Dacia Spring Extreme y no ha cumplido absolutamente nada de lo que se esperaba de él. No hay cambio de diseño más allá de un par de vinilos, no ha mejorado la batería y su autonomía y el interior, pues bueno, tiene una pantalla un poco más grande.
El Dacia Spring, a pesar de que no deja de ser un micro coche eléctrico con una autonomía bastante ridícula y una velocidad máxima –y potencia- peligrosa para enfrentarse a la autopista, en realidad es uno de los coches eléctricos más interesantes que hay disponibles a día de hoy en el mercado. Si tu bolsillo te lo permite es un excelente segundo coche para no salir de la ciudad o hacerlo más bien poco. Por unos 13.000 euros tiene una autonomía digna para tareas cotidianas y oye, por dentro no está mal. Pero es verdad que es un producto con una muy buena aceptación porque se sabe que es un Dacia, y se sabe que es su primer coche eléctrico. Ahora bien, el mercado espera con ansia esa renovación que, efectivamente, traiga más que otra cosa una mayor autonomía para poder convertirlo en el único coche de la casa, un sistema de carga más rápida y un interior con más tecnología. Y como vamos a ir viendo, el Dacia Spring Extreme que se acaba de estrenar es más bien decepcionante.
Todo lo que podría haber sido el Dacia Spring Extreme y no es, o por qué este lanzamiento es una decepción
Este año llegará al mercado el BYD Seagull, un coche eléctrico ligeramente más grande, con más potencia, con una batería de iones de sodio que le hará llegar a los 300 kilómetros de autonomía y un precio esperado de 8.000 euros. Es decir, un coche eléctrico mejor que el Dacia Spring y, sin embargo, bastante más barato. Va a ser un año fuerte para las marcas europeas tradicionales porque llegarán nuevos coches eléctricos más baratos y con precios muy competitivos. Era un buen momento para ese restyling del Dacia Spring que ‘apriete las tuercas’. Pero lo que ha llegado, en realidad, es un mero acabado de gama más alta en forma de Dacia Spring Extreme.
La marca rumana solo ha mejorado el equipamiento poniéndole una pantalla multimedia más grande que es compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Y le ha puesto una serie de detalles estéticos como elementos en color cobre, y un par de vinilos en la carrocería. Pero sigue siendo exactamente el mismo coche y con la misma batería, que es el punto débil de este modelo. Es más caro, por supuesto, porque se posiciona como el acabado más alto de la gama, y la única ventaja sustancial que tiene es que ahora llega a 65 CV.
Es verdad que el Dacia Spring tenía hasta ahora una potencia ridícula, que se mantiene para su acabado de entrada. Aún va a tener esa potencia de unos 45 CV en la versión que cuesta unos 13.000 euros con las ayudas aplicables. Y está bien este incremento de potencia que lo sitúa a la altura de los tradicionales coches de segmento A con motores gasolina. Eso está bien, claro que sí, pero es un coche en el que se debería haber priorizado la autonomía con una batería más capaz, porque el motor en un coche urbano no es tan relevante.
El restyling del Dacia Spring del que hablamos, que es el que esperábamos que ocurriera, se sigue esperando que llegue en no mucho más de un año. Y esa sí que será una actualización relevante para el modelo que, de verdad, pueda competir con los nuevos coches chinos que están a punto de aterrizar en el mercado europeo. La buena noticia es que el Dacia Spring sigue siendo el coche eléctrico más barato y que, aunque se ha desaprovechado la ocasión para hacer un producto mejor que deje atrás sus puntos débiles, sigue siendo una opción de compra recomendable. Pero lo del Dacia Spring Extreme ha sido más una decepción que otra cosa. Igual teníamos las expectativas demasiado altas.