El año pasado, BMW anunciaba que ya tenía desarrollado su propio sistema de carga inalámbrica y que a la mayor brevedad posible empezaría su comercialización. Será en julio de 2018 y estará disponible, de momento, para el BMW 530e iPerformance en Alemania, Gran Bretaña, Estados Unidos, Japón y China.
No es el primer sistema de carga sin cables de este tipo que está disponible para BMW, pero sí el primero que ha sido desarrollado íntegramente por el fabricante alemán y exclusivo para sus vehículos. Hasta ahora sus dos modelos eléctricos, el BMW i3 y el i8, ya podían recargarse de forma inalámbrica con el sistema Plugless Power, el mismo que también pueden utilizar los Nissan Leaf, Chevrolet Volt o Tesla Model S.
El siguiente paso de la electrificación
BMW está convencido de que el siguiente paso en la electrificación de los hogares de cara al uso de vehículos eléctricos serán estos sistemas de carga inalámbrica aunque, de momento, sólo lo hayan desarrollado para el BMW 530e iPerfromance, el modelo híbrido enchufable de la marca.
Este sistema cuenta con una potencia total de 3,2 kW ya que debemos tener en cuenta que su rendimiento es inferior al de un cable convencional, en torno al 85%. Esto quiere decir que es capaz de recargar completamente la batería del BMW 530e en aproximadamente tres horas y media.
Gracias a la pantalla y cámara incorporada en el coche, el conductor puede posicionar correctamente el vehículo sobre la zona de carga. La distancia a la que debe encontrarse tanto la base de recarga como el receptor situado en el coche no debe ser superior a los ocho centímetros.
Por otro lado, existe un margen de desviación permitido tanto en sentido longitudinal (7 centímetros) como en sentido transversal (14 centímetros). Una vez situado sobre la estación de recarga, no es necesario pulsar ningún botón ya que esta comienza de forma automática al detectar el sistema.
Se espera que el próximo vehículo que pueda disfrutar de este sistema sea el BMW 745e iPerformance, que debería llegar el año que viene.