Si no te ha tocado cambiar un fusible del coche, igualmente habrás oído hablar de ellos. Son los causantes de que pueda dejar de funcionar el claxon, el sistema de luces o incluso la propia radio del coche. Así que quizá te interese saberlo todo sobre ellos, que es lo que vamos a hacer en este artículo, repasar absolutamente todo lo que necesitas saber sobre los fusibles.
Bajo ese nombre se esconden dispositivos de seguridad, que es lo que son los fusibles del coche, y sirven para proteger la electrónica del vehículo. Sencillamente, porque son la ‘barrera’ para evitar que se produzca una subida de intensidad de corriente que dañaría los dispositivos asociados como, por ejemplo, los elevalunas eléctricos, las luces o el sistema de sonido del vehículo. Así, cuando esto ocurre el fusible se encarga de cortar el flujo de corriente eléctrica. Pero claro, cuando esto ocurre hay que cambiar los fusibles que se hayan estropeado.
Si se estropea un fusible, ‘algo eléctrico’ en tu coche dejará de funcionar. Pueden ser la radio, las luces o los elevalunas eléctricos. Sólo hay que sustituirlo por otro nuevo, y listo.
Qué fusibles existen y para qué sirven
Los fusibles se identifican según su amperaje. Los puedes encontrar del 5 amperios para el sensor de aparcamiento, la alarma, el claxon o el airbag. Por encima están los de 10A, para las luces, el sistema de sonido o el cierre centralizado; y a continuación los de 15A para la bomba de combustible, las luces de freno o los limpiaparabrisas.
Son diferentes según su amperaje, y en función de lo mismo varía su color. Sustituye el que se haya estropeado por uno idéntico, nunca de diferente amperaje porque puedes tener problemas mayores.
También tenemos los de 20A y superiores. Los primeros sirven para el techo solar, el encendedor o los asientos calefactables, y los que están por encima de este amperaje sirven para proteger el motor de arranque, el climatizador o los elevalunas, entre otros.
Cómo cambiar un fusible del coche
Puedes encontrar la caja de fusibles debajo del volante o en la puerta del conductor, por ejemplo. También pueden estar bajo el capó, pero su localización concreta aparece en el manual de usuario del vehículo, y es probable que haya dos cajas de fusibles ubicadas en diferentes zonas del coche. Para cambiarlo, sencillamente encuentra cuál es el que está en mal estado, sácalo y reemplázalo, sin mayor complicación.
Hay que tener cuidado, porque el hecho de que un fusible se estropee puede ser síntoma de una avería sobre el sistema eléctrico del vehículo. En principio, simplemente habría que sustituirlo por uno nuevo y deberían acabarse los problemas, pero si se ‘funden’ varios seguidos, entonces deberíamos revisar el sistema eléctrico, porque esto significa que la tensión de corriente que está llegando es mayor a la que debe. Puede ser, por ejemplo, por algún tipo de ‘corto’.