El climatizador de tu coche tiene función de aire acondicionado y también de calefacción. Lo normal es que puedas regular la temperatura y también el caudal de aire que se distribuye por el habitáculo del vehículo. Pero estas no son las únicas funciones que tiene el aparato de climatización del coche. Y hay un botón en concreto que nos puede ayudar a ahorrar hasta un 30% en gasolina, y muchos conductores no saben que existe, o no saben cómo se utiliza. Es importante conocerlo porque, además, modifica en gran medida cómo funcionan tanto la calefacción como el aire acondicionado.
En un coche gasolina, o en uno diésel, el sistema de climatización va físicamente vinculado al motor del coche. De hecho, es el propio motor del vehículo el que hace funcionar el mecanismo del sistema de climatización. Por eso, utilizar el aire acondicionado, o la calefacción, consume gasolina porque obliga al motor a hacer un mayor esfuerzo del que haría si estuviese desactivado. Conociendo esto, lo que te falta por saber es que en el salpicadero de tu vehículo hay un botón que es el de la función de recirculación del aire. Tiene siempre un pequeño pictograma con un coche con una flecha semicircular en su interior, y este es el botón que si se utiliza correctamente te puede ayudar a ahorrar hasta un 30% de gasolina.
El infravalorado botón de recirculación interior del aire
El funcionamiento normal de un sistema de climatización, o de aire acondicionado, se basa en tomar aire del exterior del coche, enfriarlo o calentarlo y expulsarlo al interior del vehículo. Este botón de recirculación del aire lo que hace es bloquear la entrada de aire y utilizar, para el circuito de aire acondicionado o de calefacción, el mismo aire del habitáculo. Es decir, que no toma aire de fuera del coche, sino que utiliza directamente el mismo aire que ya está dentro del vehículo, y sigue enfriándolo o calentándolo. Entonces ¿cuál es la ventaja? Sencillamente, que se reduce el esfuerzo enormemente.
Este botón de recirculación del aire se puede utilizar de forma puntual en zonas de contaminación, para evitar que entre la suciedad dentro del coche, o en zonas donde puede haber alérgenos que nos perjudiquen, por ejemplo, así como polvo. Sin embargo, durante el invierno también nos puede ayudar a reducir el consumo de gasolina, porque tal y como comentábamos anteriormente es una función que ayuda a reducir el esfuerzo que tiene que hacer el motor del coche para hacer funcionar el aire acondicionado y la calefacción.
Lo más recomendable es activar la recirculación del aire justo en el momento en el que nos montamos en el coche y al arrancar, durante unos 10 minutos aproximadamente, que será el tiempo que tarde nuestro coche en estar caliente –el motor, más concretamente- y en empezar a hacer funcionar la calefacción a su máximo rendimiento. Es decir, cuando el habitáculo está más frío porque está empezando a funcionar la calefacción es cuando se recomienda activar este botón, y esta función, porque es cuando nos va a permitir ahorrar hasta un 30% de gasolina con respecto a lo que haría consumir, de normal, el funcionamiento de la calefacción.
Una vez que el interior del coche ya está caliente se puede desactivar, y además se recomienda que se haga. La función de recirculación del aire no se debería mantener por más de 15 minutos seguidos porque también hay que dejar que se renueve el aire del habitáculo. Sino podemos tener problemas de somnolencia, además de que la calidad del aire del interior del coche no será la ideal. Por otro lado, una vez que el habitáculo está caliente y el coche está en circulación, sobre todo si es por autopista, la diferencia de consumo ya va a ser muy pequeña.