BYD tiene listo, o casi listo, su desembarco en Europa por todo lo grande. Aquí, en España, sabemos que quedan menos de tres meses para que se estrenen con de momento tres modelos, aunque poco a poco se irá extendiendo su gama de coches eléctricos. Lo que no sabíamos hasta ahora es que el fabricante asiático está pensando en España como localización para su fábrica de coches eléctricos europea, algo que le sentaría de maravilla a la industria del automóvil a nivel nacional y que garantizaría precios más bajos en modelos clave que se comercializarán en el Viejo Continente. Pero de momento la decisión no está aún tomada.
Parece que BYD está tanteando el terreno y valorando varias opciones para instalar una fábrica de coches eléctricos en algún punto de Europa, y de entre las varias opciones que barajan una es España. Y no es extraño teniendo en cuenta que la península es un punto estratégico en el mercado europeo y una excelente conexión con proveedores por vía marítima. Si hasta el día de hoy España se ha posicionado como un punto clave en Europa para el sector del automóvil es porque hay motivos para ello, aunque con la transición hacia el coche eléctrico parece que el país se ha quedado ‘dormido’, en buena parte por culpa de malas decisiones políticas. Y ahora, con la llegada de la fábrica de baterías de Volkswagen en Sagunto, y la posible instalación de una fábrica de coches eléctricos por parte de BYD, sin duda parece que las cosas empiezan a cambiar.
BYD baraja España como localización para su fábrica de coches en Europa, aunque hay otras opciones sobre la mesa
La compañía china va a empezar a operar en Europa basándose en la producción de coches eléctricos en China, y eso hace que en el Viejo Continente sean menos competitivos. ¿Por qué? Por una cuestión de costes indirectos relacionados con el transporte, la logística, los aranceles y un largo etcétera. Así que, según este interesante informe en The Guardian, BYD se está planteando a medio plazo tener la posibilidad de fabricar coches eléctricos directamente en Europa, aunque a priori mantendrían el suministro de baterías en China.
No hay que olvidar que estamos hablando del segundo fabricante mundial de baterías para coches eléctricos, pero este negocio, y hasta cierto punto, va por una vía paralela. Y en este sentido, sobre todo, hay que tener en cuenta la disponibilidad de materia prima en cercanía. Así que, aunque también cabe la posibilidad de que estén valorando una fábrica de baterías en suelo europeo, que tendría también mucho sentido, respecto a esto no tenemos todavía información fiable como para avanzar absolutamente nada.
En las últimas semanas se ha podido saber que BYD está moviendo ficha para, efectivamente, fabricar coches en Europa. Eso sí, se habló a principios de año de que BYD podría haberse interesado por la fábrica de Ford en Saarlous, en Alemania, para empezar a operar allí tan pronto como se deje de producir el Ford Focus. Sin embargo, parece que esta operación no se llevará a cabo, sino que la compañía china estaría mirando otras opciones. De hecho, la vicepresidenta ejecutiva de la compañía, Stella Li, ya aclaró que prefieren levantar su propia fábrica de coches eléctricos en lugar de comprar una que ya esté operativa.
La última información que hemos podido conocer es que BYD tiene una lista de países posibles para el despliegue de su fábrica de coches eléctricos en Europa. Y en esa lista están ahora mismo Alemania, Francia, Polonia, Hungría y España. No sabemos cuáles son exactamente las variables con las que trabaja BYD, y las que harían que la compañía fabricante de automóviles se decante por un país u otro. Pero seguro que a lo largo de las próximas semanas se va a ir desvelando más información al respecto, porque al parecer es algo que tienen ya bastante avanzado.
El hecho de que BYD cuente con una fábrica de coches eléctricos implica tener menos costes en el proceso de fabricación y hasta la comercialización para los coches que se vendan en Europa. Es decir, que la compañía tenga la posibilidad de ofrecer precios más bajos para los coches que se comercialicen en nuestro país y el resto de países del Viejo Continente. Así que, se asiente donde se asiente la fábrica, siempre que sea en Europa, nos beneficiará a todos los europeos. Ahora bien, los beneficios para el tejido industrial español del sector del automóvil, si se asienta en España, sin duda serían mucho más grandes.