En la compra de un coche nuevo no deberíamos contemplar únicamente el precio de compra del vehículo, sino también los costes de mantenimiento. Y también los costes de reparación. No, no todos los fabricantes y modelos tienen los mismos precios para su mantenimiento y reparación. Pero sí hay una tendencia que está afectando a todos: las nuevas tecnologías, y entre ellas los sistemas de asistencia, están haciendo crecer los costes de reparación de forma generalizada.
En los coches nuevos es cada vez más frecuente que contemos con tecnologías como los sistemas de alerta de cambio de carril involuntario, freno autónomo de emergencia, y un largo etcétera de asistencias similares. Un estudio de AAA nos enseña el importante coste de reparación que implican los sensores y las cámaras de que dependen estas tecnologías, y que se pueden ver afectados por cosas tan simples como un pequeño golpe en el paragolpes delantero o trasero.
Las ‘asistencias’ pueden duplicar el coste de reparación de tu coche
En el estudio se llega a la conclusión, después de haber revisado los precios de reparación de una amplia variedad de modelos, de diversos fabricantes, de que el coste promedio de reparación se acerca al doble en coches con estas tecnologías de asistencia, frente a los que no las tienen. Y por supuesto, en el análisis se han tenido en cuenta los modelos a la venta actualmente.
El elevado coste que implican estos sistemas de asistencia a la conducción no esta solo en las piezas que hay que sustituir cuando corresponde, sino también el coste de instalación. En tanto que estos sistemas requieren de más tiempo de montaje –cuando hay cámaras, sensores… en paragolpes y otras piezas-, hay que contar con un mayor gasto en la mano de obra. Además, hay que llevar a cabo un procedimiento de calibración.
Un ‘ligero toque’ en el paragolpes el paragolpes delantero puede dañar los sensores ultrasónicos que sirven como asistencia al estacionamiento. El coste de los mismos puede oscilar entre los 500 a 1.300 dólares. Y en este mismo golpe se podría dañar la cámara frontal de aparcamiento, con un coste de 500 a 1.100 dólares, o los sensores de radar para el control de crucero adaptativo, que pueen rondar los 900 a 1.300 dólares.