El carné por puntos lleva vigente ya más de diez años, y desde la Dirección General de Tráfico dejaron en evidencia la necesidad de introducir algunos cambios desde la entrada de Gregorio Serrano a su dirección. Hay dos problemas que quiere resolver la DGT: por un lado, el repunte de la siniestralidad, y por otro lado la reincidendia de los infractores. En base a esto mismo, pronto habrá novedades para el carné por puntos.
Con otras tantas medidas, lo que se pretende es reducir la siniestralidad en las carreteras de España, y en lo que respecta al carné por puntos, uno de los horizontes clave está en minimizar la reincidencia de los infractores en la conducción. Según esto mismo, uno de los puntos clave será revisar qué infracciones suponen la retirada de puntos del carné y cuáles no, y evidentemente modificar –si corresponde- la cuantía de puntos que se retiran por cada infracción que conlleve esta acción.
Qué infracciones suponen la retirada de puntos
Esta revisión del carné por puntos conllevará una modificación muy clara: sólo las infracciones que atenten contra la seguridad vial, de forma directa, supondrán la retirada de puntos. El resto, como ya ocurría ahora, se mantendrán únicamente con sanciones económicas. Por ejemplo, tirar una colilla por la ventanilla. Ahora bien, al mismo tiempo se podría aumentar la retirada de las que sí supongan un problema directo –y según la gravedad- para la seguridad vial.
También a extranjeros, y cursos más efectivos
Entre las propuestas está también la posibilidad de que se retiren puntos a conductores extranjeros, algo que actualmente está dejando ‘libres’ a miles de conductores de afrontar la responsabilidad de sus infracciones en la conducción, más allá de la correspondiente sanción económica. Así, se propone que se retiren puntos en la Unión Europea con una mayor armonización de la normativa por cada país, o bien se establezca un acuerdo entre los mismos.
Otro punto importante a revisar en el carné por puntos son los cursos para la recuperación de los mismos, que actualmente parecen ser poco efectivos. Y lo que se propone son cursos específicos para cada tipo de infractor, de tal manera que se reduzca la reincidencia de los conductores infractores. Con este mismo propósito, se pretende también instaurar la retirada indefinida del carné por falta de aptitudes físicas, de tal manera que los adictos no puedan conducir hasta que se certifique la rehabilitación.