Las baterías de los coches eléctricos salen de algún lado, como te puedes imaginar. Necesitan de minerales y materiales raros que se extraen de minas. Y la actividad minera es insuficiente para hacer frente a la demanda que se aproxima de coches eléctricos en todo el mundo. Pero no hay problema en este sentido, porque ya han calculado cuántas minas hay que abrir para poder fabricar todos esos vehículos eléctricos. Estamos hablando de nada menos que 350 nuevas minas que se dedicarán a sacar litio, cobalto, níquel y grafito entre otros materiales que vamos a ir viendo a continuación.

Como no todas las minas tienen el mismo potencial de producción, para este cálculo Benchmark Mineral Intelligence se ha basado en el promedio de producción anual para cada una de las minas necesarias que requiere la fabricación de baterías de iones de litio. Partiendo sobre esta base, una mina de litio tiene una producción media anual de 45.000 toneladas métricas, lo que significa que se van a necesitar 74 minas nuevas para el año 2035, hasta que se alcancen 3,3 millones de toneladas métricas de producción actual. Y esto se sumaría a los 4 millones de toneladas métricas que se están produciendo en la actualidad.

Hay que abrir 350 minas de litio, níquel, cobalto y grafito para fabricar coches eléctricos

De cobalto hay disponible una producción de 177.000 toneladas métricas, pero se necesita llegar a 489.000 toneladas para el año 2035. A una producción promedio anual de 5.000 toneladas métricas de cobalto, en un plazo de 13 años se van a tener que abrir 62 minas nuevas. Y en la producción de baterías para coches eléctricos hay otro componente clave que es el níquel, en celdas como las NCA o las NCM especialmente. Se van a necesitar 6,2 millones de toneladas métricas para el año 2035, pero ahora mismo estamos en una producción mundial de 3,16 millones. Para llegar a esa cifra, considerando que producen 42.000 toneladas métricas de media, harán falta 72 nuevas minas de níquel para llegar al nivel de producción necesario.

Y hay un último material clave que es el grafito, que se puede producir de forma natural o sintética. Aunque el natural es más barato, lo cierto es que su calidad es inferior y es menos adecuado para la producción de baterías de coches eléctricos. Una mina produce en torno a las 56.000 toneladas métricas y vamos a necesitar 7,21 millones de toneladas, frente a los 1,11 millones que se producen en la actualidad. Así que vamos a necesitar nada menos que 97 minas de grafito totalmente nuevas, y esto considerando que se combinen las minas con la producción sintética.

Pero ¿qué va a implicar todo esto? En primer lugar, que según Québec hacen falta entre 10 y 15 años para llevar a cabo un proyecto minero; y en segundo lugar, que el MIT estima en entre 500 y 1.000 millones el coste que implica el despliegue de una instalación minera. Las cosas han cambiado porque aquellos datos eran del 2011. Y a pesar de ello, significaría una inversión de 179.500 millones de dólares en estas nuevas minas que van a hacer falta, sí o sí, para la fabricación de baterías para todos estos nuevos coches eléctricos.

Por supuesto, en los próximos años hay cosas que van a cambiar. Ya se están desarrollando baterías que requieren de menos de estos materiales, con mejor densidad energética y más baratas. Pero lo que está claro es que la llegada y adopción del coche eléctrico está cambiando la industria por completo y, a muchos niveles, todavía no estamos preparados desde el prisma de la industria. Y hay todavía importantes inversiones que se tienen que llevar a cabo y que, no nos quepa la menor duda, van a repercutir sobre los precios finales de los coches eléctricos.