El Hyundai Tucson se ha establecido como el claro líder en ventas en el mercado español, de entre los SUV del segmento C. Sin embargo, hay una opción alternativa que es claramente mejor en un aspecto muy concreto. Justo en el aspecto en el que el Hyundai Tucson tiene su mayor carencia, este SUV de dimensiones parecidas cumple de mejor manera. Y por eso hay quienes prefieren inclinarse por él, porque además tienen unos precios muy parecidos. Ahora bien, te voy a contar cuáles son exactamente sus diferencias y similitudes, y seguro que te va a quedar claro cuál es mejor comprarse.
Las cifras de ventas hablan por sí solas, y el Hyundai Tucson es un éxito en España. No obstante, la versión más barata de su gama usa un motor 1.6 TGDi de 150 CV de potencia máxima que, si bien tiene un buen rendimiento y un consumo contenido, tiene una carencia importante. No tiene ningún tipo de electrificación, así que cuenta con la etiqueta C de la DGT. Y sin embargo hay dos modelos alternativos que sí tienen etiqueta ECO de la DGT y compiten dentro de la misma categoría. Por un lado el Nissan Qashqai, que es en el que me quería centrar en este artículo, pero por otro lado está también el Renault Arkana, que usa exactamente el mismo motor que el modelo japonés.
El Nissan Qashqai tiene algo mejor que el Hyundai Tucson, y es que su versión más barata ya cuenta con la etiqueta ECO de la DGT
Frente a ese motor 1.6 TGDi de 150 CV que te digo que lleva el Hyundai Tucson más económico, el Nissan Qashqai usa un motor 1.3 DIG-T MHEV de 140 CV de potencia máxima. Y sí, es verdad que tiene una potencia un poco más baja, pero lo importante es que es un motor que ya lleva tecnología mild hybrid de 48 V, y solo por ese motivo cuenta con la etiqueta ECO de la DGT. ¿Es esto tan importante? Pues sí, porque cada vez son más restrictivas las políticas a la circulación con vehículos etiqueta C.
En esta diferencia, no cabe ningún tipo de duda: el Nissan Qashqai es mejor. Ahora bien, es verdad que el modelo japonés tiene sus propios problemas frente al Hyundai Tucson. Empezando por el hecho de que, frente a los 4,5 metros que mide el surcoreano, un Nissan Qashqai se queda en 4,42 metros de longitud de carrocería con unas plazas traseras algo más pequeñas y, sobre todo, con un maletero de solo 504 litros frente a los destacables 598 litros con que cuenta un Hyundai Tucson.
A nivel de precios son bastante parecidos, aunque el Hyundai Tucson mantiene tarifas más actualizadas y adaptadas –casi de forma constante- a las de sus competidores. Ahora mismo, el Nissan Qashqai más básico cuesta 27.550 euros y, sin embargo, el Hyundai Tucson se puede comprar desde 25.125 euros. Eso sí, para el mild hybrid con etiqueta ECO, dentro de la gama del Tucson, hay que gastarse unos 4.300 euros más que lo que cuesta la versión básica, y a fin de cuentas ofrece el mismo motor, y la misma potencia que el básico, pero con un sistema de microhibridación de 48 voltios.
Todo depende de qué te resulte más importante. El Hyundai Tucson es mejor coche en general, y más amplio, pero a nivel de motor ‘gana’ el Nissan Qashqai. Y cuidado, no porque rinda mejor o dé más potencia, sino sencillamente porque por un precio más bajo es más recomendable por su etiqueta ECO. Ahí está también el Renault Arkana, como te decía antes, con un motor 1.3 TCe MHEV de 140 CV como opción más barata y un precio de 26.750 euros aproximadamente. También es un modelo que te recomendaría bastante más que un Nissan Qashqai, y también tiene la etiqueta ECO que no ofrece el Hyundai Tucson.