Estamos en una era totalmente nueva y todas y cada una de las marcas de coches van a tener que pasar por el aro de la electrificación de una forma o de otra y más o menos rápido. Esta marca italiana es una de las que siempre ha renegado a ceder a la electrificación hasta que no les ha quedado otra. Y van a hacerlo despacio, sí, y acomodándose a lo que demandan sus clientes, que entre otras cosas es el rugir de un motor de muchos cilindros y de gran cilindrada. Pero es que acaban de presentar un sistema híbrido increíble de principio a fin, una auténtica obra de ingeniería que aunque es ‘ECO’ da más de 1.000 CV de potencia. Veámoslo en detalle, porque merece la pena detenerse en cómo está diseñado y cómo funciona.
Lamborghini, antes que Ferrari, apostó por los SUV en contra de lo que hace ya varios años parecía que harían. Y la jugada les salió bien porque han llegado a un público distinto y más amplio, y por supuesto han multiplicado sus ventas. Y es una de esas varias marcas que a priori parece que no tienen futuro a medida que se va acercando la electrificación de todas las mecánicas. Sin embargo, la marca italiana se acaba de sacar de la chistera una nueva mecánica híbrida que sí, se puede catalogar de ‘ECO’ según los parámetros y exigencias actuales, pero da más de 1.000 CV. En concreto desarrolla 1.015 CV esta unidad de potencia que, para el agrado de los clientes de la marca y sus fans, se basa en un nuevo motor V12 de 6.5 litros de cubicaje. Y que, por si esto fuera poco, es un motor de aspiración natural, atmosférico como le gusta a los más puristas.
Así es el brutal motor híbrido de Lamborghini con 1.015 CV de potencia sobre un V12 6.5 litros de aspiración natural, sencillamente increíble
Como no podía ser de otro modo, la mayor parte de la potencia proviene del motor central V12 de 6.5 litros atmosférico que, por cierto, se llama L545. Este bloque produce por sí solo 814 CV de potencia máxima a 9.250 rpm. Entre las claves técnicas de este nuevo motor está el hecho de que produce 726 Nm de par motor máximo a 6.750 rpm y se ha girado 180 grados con respecto al diseño del Aventador. Por otro lado, también tiene una relación de compresión superior a la alcanzada en el Aventador más reciente, con 12,6:1 frente a la marca anterior de 11,8:1.
El motor V12 está asociado a una transmisión de doble embrague y ocho relaciones, que en contra del esquema habitual no está montada de forma longitudinal y por delante sino que tiene un montaje transversal tras el motor. Esto tiene una explicación, y es que los ingenieros de la marca italiana Lamborghini necesitaban espacio en lo que habría sido de manera típica el túnel de transmisión. ¿Para qué? Para montar aquí una batería de iones de litio longitudinal en la parte central con una capacidad de almacenamiento energético de 3,8 kWh. Un espacio mejor aprovechado que hace que el peso de la batería esté centrado y ayude al balance del coche.
Esta batería de iones de litio se encarga de alimentar tres motores eléctricos. Uno de ellos va integrado directamente en la transmisión, para ayudar a impulsar las ruedas traseras, y sin embargo los otros dos motores eléctricos están cada uno en una rueda delantera. Así que en este caso sí, cumpliendo con lo habitual en Lamborghini, va a dar vida a coches con tracción total, pero con la particularidad de que no habrá conexión mecánica entre el eje delantero y el trasero.
Pero lo que sí va a tener es tracción total en modo híbrido y también en modo eléctrico en distancias cortas, con un sistema de vectorización de par en la parte delantera para optimizar el comportamiento dinámico. Todo esto, como seguramente ya sabrás, forma parte de la nueva configuración mecánica que estrenará el sucesor del Lamborghini Aventador. Un paso adelante a nivel técnico por parte de la marca italiana que, como las demás, aunque de una forma diferente, también tiene que ir cediendo progresivamente a la electrificación. Pero vaya forma de hacerlo.