CATL, el principal fabricante de baterías para coches eléctricos en todo el mundo, va a dar su siguiente paso. Hace dos meses estuvieron haciendo pruebas con sus nuevas baterías de materia condensada. Y ahora han anunciado que estarán listas en 2023, aunque no han precisado con mayor detalle. Y además tampoco han querido ser demasiado claros con las mejoras que implica este tipo de batería para vehículos eléctricos, pero sí han avanzado que son más seguras, son más fiables y además ofrecen una vida útil más amplia en cuanto a ciclos de carga y descarga.
El fabricante chino CATL, especializado en baterías para coches eléctricos, acaba de presentar oficialmente las nuevas baterías Qilin, sus ‘Cell to Pack’ 3.0, que llegan a un volumen aprovechado del 72% por paquete de batería y 255 Wh/kg de densidad energética. En cifras más fáciles de comprender, esto implica el desarrollo de coches eléctricos con 1.000 km de autonomía, además de una eficiencia energética notablemente superior a la que se había alcanzado ahora. Además, este tipo de batería se diferencia del resto por su diseño estructural y no por su química, porque está planteado tanto para baterías ternarias como para baterías de tipo LFP. Pero, efectivamente, ya tienen preparado su próximo gran salto y vendrá dado por las baterías de materia condensada.
Las nuevas baterías de materia condensada de CATL llegarán en el año 2023
Las baterías de materia condensada, según las indicaciones de Wu Kai, científico jefe de CATL, llegarán en el año 2023. De momento no hay una fecha específica para el lanzamiento de esta nueva generación de celdas de batería, pero seguramente dependerá también de las asociaciones con fabricantes. Es decir, que es probable que están cerrando la asociación con un fabricante de coches para concretar un primer modelo que cuente con este tipo de batería. Y en función de cuándo se vaya a lanzar este modelo, será cuando CATL nos cuente más sobre el lanzamiento de las baterías de materia condensada.
Entre las claves de este nuevo tipo de batería, aunque Wu no ha entrado en detalles demasiado relevantes, está el hecho de que ofrecen un mayor nivel de seguridad, una fiabilidad también más alta y una vida útil más extensa en ciclos de carga y descarga. Robin Zeng, el fundador y presidente de CATL, avanzó a principios de este verano que la compañía china está trabajando en varias nuevas tecnologías. Además de estar dedicados a tecnologías innovadoras que ya tienen disponibles, como las nuevas baterías Qilin, en estos momentos están también desarrollando sus baterías de estado sólido, baterías de estado semisólido y un nuevo tipo del que no se había oído hablar antes.
En estos momentos, CATL no es únicamente el principal fabricante de baterías para coches eléctricos en todo el mundo por su volumen de producción. También están desmarcados de sus competidores, como BYD, CATL o LG, por el desarrollo de nuevas tecnologías. Entre los varios proyectos en los que están volcados está el desarrollo de una evolución de las baterías LFP con mayor densidad energética para su uso en coches eléctricos baratos. Así que, además de baterías con prestaciones mejores a las que ofrecen las actuales, también tienen como proyecto baterías mucho más económicas.
De momento, sobre las baterías de materia condensada desgraciadamente no tenemos los detalles más importantes. Pero CATL es la única compañía que ha anunciado algo respecto a esta tecnología, y se han ceñido a adelantar que mejoran principalmente en seguridad, fiabilidad y vida útil. No parece que vayan a suponer una mejora notable en otros aspectos como la densidad energética o la velocidad de carga.