Aunque BMW tiene pensado disponer de baterías de estado sólido en 2030, antes de que ese momento llegue van a seguir mejorando su tecnología de baterías para coches eléctricos. El último paso que han dado es la introducción de la sexta generación de baterías, que con respecto a las ‘Gen 5’ actuales permite conseguir más potencia y además también una autonomía mayor. Entre otras cosas porque se ha modificado la batería a nivel estructural, optando por una estructura celular, y porque se ha modificado cómo esta batería se integra en el chasis. Veamos cuáles son, exactamente, todas las ventajas que aportan estas baterías ‘Gen 6’ de BMW.
Esta nueva generación de baterías es un importante paso hacia el frente. Respecto a las que se están utilizando ahora mismo, las ‘Gen 6’ introducen una densidad energética un 20% superior y además garantizarán un 30% más de autonomía. Según las estimaciones del fabricante alemán, con esta nueva tecnología de baterías para coches eléctricos van a poder desarrollar modelos de hasta 1.000 km de autonomía, aproximadamente. Y este tipo de autonomías, efectivamente, se espera que se empiecen a ver con los nuevos modelos que se estrenarán sobre la plataforma Neue Klasse. Para conseguir esto se ha modificado todo el diseño de batería, por ejemplo, integrando las baterías en el chasis en un formato que además permite reducir un 30% los tiempos de carga. No solo por el cambio de diseño, evidentemente, sino también por otros motivos entre los que está la introducción de una arquitectura de 800 voltios.
Estas son las enormes ventajas de las nuevas baterías ‘Gen 6’ de BMW para sus coches eléctricos
Anteriormente se utilizaba una estructura modular en la batería, que implicaba agrupaciones de celdas en conjuntos independientes. Ahora, sin embargo, se montan las celdas directamente y con ello se ahorra una importante cantidad de material, se reduce el peso y además también se reducen costes de producción. Las ventajas que trajeron las ‘Gen 5’ de BMW, que son las que se utilizan a día de hoy, tienen que ver con el cambio de celdas prismáticas a celdas cilíndricas, y esto es algo que se mantiene en estas nuevas ‘Gen 6’.
Son celdas más pequeñas y permiten conseguir una mayor densidad energética. La marca alemana va a disponer de baterías 46 mm de diámetro y 120 mm de altura para modelos SUV y crossover, y en modelos más pequeños usarán celdas con el mismo diámetro y 95 mm de altura. Gracias a la reducción de la cantidad de materiales empleados en cada paquete de batería, además de que se reducen los costes de producción, también se produce un 60% menos de CO2 desde la materia prima hasta la producción del paquete final.
Y otro punto muy importante es que este nuevo tipo de baterías mejora la prevención de propagación de fugas térmicas entre celdas. Es decir, que no solo mejoran en velocidad de carga, en densidad energética, en costes y en autonomía, sino que también son baterías más seguras. Y serán uno de los pasos anteriores a la llegada de las baterías de estado sólido que, como comentábamos anteriormente, BMW tiene previsto que ocurra en el año 2030. Antes, eso sí, tendrán al menos un prototipo con el que nos mostrarán qué van a poder ofrecer con las baterías de electrolito sólido.
Y mientras tanto, estas baterías ‘Gen 6’ llegarán durante el año 2025, puesto que se estrenarán con el primer coche eléctrico construido sobre la plataforma Neue Klasse. Esta plataforma dará, efectivamente, nuevos modelos de coche eléctrico hasta un máximo de 1.000 kilómetros de autonomía y con niveles de potencia entre los 250 CV como mínimo y soportando un máximo de 1.000 CV. Parece que la marca alemana ha pisado el acelerador con el desarrollo tecnológico de los coches eléctricos y, sin duda, estas nuevas baterías van a ser un componente clave en su futuro más cercano.