Ahora sí, de forma oficial, el Grupo PSA ha anunciado públicamente la compra de Opel a General Motors. Una operación por la que el grupo francés tendrá que desembolsar 2.200 millones de euros según el acuerdo cerrado con la americana General Motors, y a través del cual conseguirán posicionarse como el segundo grupo automovilístico en Europa, sólo por detrás del grupo alemán Volkswagen, con una diferencia inferior a las 100.000 unidades de vehículos producidos.
Tras semanas de negociaciones ya se ha anunciado de forma oficial, y por el importe filtrado durante los últimos días, que PSA compra Opel. El grupo americano General Motors dejará de ostentar la propiedad sobre Vauxhall y Opel y pasará a corresponder al Grupo PSA. Y según las cifras exactas, la compra de Opel costará 1.300 millones de euros –junto con Vauxhall-, mientras que los 900 millones de euros restantes en la operación corresponden a la compra de GM Financial.
Las previsiones del Grupo PSA pasan por alcanzar un margen de explotación recurrente del 2% para el año 2020, y ascender la cifra hasta el 6% durante el año 2026. La valoración de la fabricación de las marcas Vauxhall y Opel está cifrada en 1.700 millones de euros anuales, junto al I+D, y el grupo francés espera generar un flujo de caja positivo en el año 2020. Para esta operación, además, el grupo automovilístico francés ha recibido el apoyo de BNP Paribas que permitirá llevar a cabo la operación en una joint venture.
Junto a Opel y Vauxhall en la compra está contemplada GM Financial por un importe de 900 millones de euros, y esta es la que se encargaba de administrar las operaciones financieras de General Motors en el mercado europeo, tanto de Opel como de Vauxhall en los diferentes mercados en que están presentes.
En la adquisición de las dos marcas, el Grupo PSA y General Motors han acordado las 11 instalaciones de montaje y fabricación de componentes a nivel europeo, el centro de ingeniería de Alemania y los más de 40.000 empleados que se dedican a las compañías Vauxhall y Opel, así como a GM Financial. Lo único que conservará General Motors a nivel europeo será el centro de ingeniería ubicado en Italia, en lo que hasta ahora ha afectado a las marcas adquiridas por PSA.
En cuanto a los nuevos vehículos tras el acuerdo, Opel y Vauxhall mantendrán las licencias de propiedad intelectual. No obstante, de forma progresiva se convertirán a la tecnología de PSA. Es decir, que en los próximos años iremos viendo cómo la renovación de todos los vehículos Opel y Vauxhall se basan en plataformas, motores y tecnologías de vehículos Peugeot, Citroën y DS.