La mayoría de los fabricantes están apostando por hacer un mismo modelo que cuente con versiones híbridas y una configuración, al menos una, totalmente eléctrica. La firma japonesa se mantiene a contracorriente y el Toyota C-HR 2024, que acaban de presentar en forma de ‘Toyota C-HR Prologue’, ya nos destapa cuál es la estrategia de la marca. Este exitoso SUV va a tener una versión híbrida como hasta ahora y además sumará a su gama una versión híbrida enchufable. Lo lógico habría sido también una versión eléctrica, pero no, no habrá Toyota C-HR 2024 eléctrico, en contra de lo que creíamos.
En este adelanto, en forma de ‘concept car’, la marca japonesa nos adelanta casi sin secreto alguno cómo será el diseño del nuevo Toyota C-HR 2024. Que para sorpresa de nadie, porque ya se había filtrado hace varias semanas, va a heredar el nuevo lenguaje de diseño que parecía que sería exclusivo para la submarca bZ, o ‘beyond Zero’, centrada en coches eléctricos. Es decir, que hasta cierto punto va a parecer una versión pequeña del Toyota bZ4X, porque mantiene la misma filosofía de diseño. Sin embargo, solo estará disponible con mecánicas híbridas e híbridas enchufables, y en ningún caso se plantean introducir en este modelo una configuración eléctrica pura. ¿Por qué? El motivo es sencillo, y es que en contra de toda lógica Toyota va a tener un segundo modelo dentro del mismo segmento que será el Toyota bZ3X.
El Toyota C-HR 2024 tendrá versión híbrida y versión híbrida enchufable, pero el eléctrico será el Toyota bZ3X
La próxima generación del Toyota C-HR debería estar disponible en algún momento entre finales de 2023 y comienzos del próximo año 2024. La marca no ha revelado aún en qué fecha exacta se hará el lanzamiento comercial, pero sabemos que en un inicio estará disponible la versión híbrida no enchufable, y que poco tiempo más tarde se estrenará en el mercado la configuración híbrida enchufable. Evidentemente, antes de que todo esto ocurra se presentará el diseño final del C-HR 2024 que, eso sí, tendrá muy pocas diferencias estéticas con respecto a lo que vemos en este ‘Prologue’.
Y en cuanto a este diseño, como ya habían destapado las filtraciones podemos ver que se sigue el mismo lenguaje de diseño que en el Toyota bZ4X, pero con una línea más fluida y un enfoque algo más deportivo, notable especialmente en la zaga. Tiene una mayor inclinación de la luna trasera a partir del pilar C, y eso evidentemente perjudicará a la capacidad del maletero ligeramente. Será un coche algo más corto que el Toyota bZ3X, a juzgar por el adelanto de uno y de otro, y con un diseño algo más juvenil y expresivo. Se cambiarán cosas como los retrovisores, las llantas y algunos otros pequeños detalles antes de que llegue al mercado en su forma definitiva.
A juzgar por lo que nos enseña este ‘Prologue’, parece que Toyota ha ignorado lo que más quejas generó del Toyota C-HR. La manija de la puerta trasera sigue manteniéndose demasiado elevada en el pilar C y el la ventanilla de las plazas traseras sigue siendo demasiado pequeña. Esto se criticó en el Toyota C-HR aún disponible porque los niños no llegan a abrir la puerta y en las plazas traseras, que tienen buen espacio, la sensación es algo agobiante por la escasa entrada de luz. Y como se puede ver en la fotografía justo anterior, parece que se va a mantener exactamente el mismo enfoque.
A nivel de configuración mecánica, lo lógico –aunque no está confirmado aún- sería que se mantenga lo que ya tiene el Toyota Prius recién presentado. Es decir, como base un motor gasolina de 2.0 litros de cubicaje en asociación con un único motor eléctrico para prestar 223 CV en conjunto. Y con una batería de 15,5 kWh, por supuesto de iones de litio, para llegar a una autonomía en modo totalmente eléctrico de unos 80 kilómetros aproximadamente. Una mecánica equilibrada, con buenas prestaciones y, sobre todo, destacando en fiabilidad y consumo como es habitual en los híbridos de la marca japonesa.