Mientras todos los fabricantes de coches eléctricos están rompiéndose la cabeza, tratando de conseguir mejores baterías y que carguen más rápido, la marca china NIO tiene la mejor solución ya disponible. Con ella son capaces de darle al conductor una carga del 100% de batería en nada más y nada menos que 5 minutos. Vamos, que consiguen que los usuarios de sus coches eléctricos tarden lo mismo que un gasolina, o un diésel, en volver a tener el máximo de autonomía disponible. Pero es con un truco, y lo cierto es que es de las idea más inteligentes que se han visto en la industria del vehículo eléctrico.
La forma en que lo hace NIO se denomina Battery Swap Stations; es decir, ‘Estaciones de Cambio de Baterías’. De momento no hay ninguna en España, pero podemos tener por seguro que acabarán llegando aquí a medida que NIO se vaya expandiendo por Europa. Y son básicamente unas instalaciones, parecidas a un túnel de lavado, en las que los conductores de coches eléctricos de NIO tienen que meter el coche entero. Al meterlo, la plataforma interior desmonta la batería del vehículo y, en un proceso totalmente automatizado, monta otra batería. La clave está en que desmonta una batería descargada –la que llevamos puesta- y monta una batería totalmente cargada.
Cambiar la batería en lugar de cargarla, o cómo conseguir el 100% de autonomía en tan solo 5 minutos
Con esta tecnología de NIO, como es evidente, se abandona el concepto de propiedad de la batería de nuestro coche eléctrico por una ‘buena causa’. Estas estaciones de intercambio de baterías lo que hacen es desmontar la batería, moverla a una dependencia específica para carga de baterías, y la mantienen ahí conectada al sistema de alimentación hasta que está cargada por completo. Cuando la batería está de nuevo totalmente llena de energía, entonces el sistema la identifica como disponible para otro vehículo.
Así que estas estaciones de intercambio de baterías a lo que se dedican es a cambiar baterías de los usuarios que vienen con su batería descargada. Quitan la batería descargada y les instalan una batería previamente cargada. Es una solución que requiere de un cierto espacio de almacenamiento y de una tecnología automatizada, muy avanzada. Pero que, para los conductores, se traduce en una carga de batería al 100% en solo 5 minutos. Evidentemente, se abandona el concepto de propiedad de la batería, pero ¿a quién le importa realmente eso?
NIO ya tiene estaciones de estas repartidas por toda China, que es donde tienen mayor actividad comercial. No obstante, en varias ocasiones han manifestado ya sus planes para ir expandiéndose no solo con la comercialización de sus coches eléctricos, sino también con sus estaciones de intercambio de baterías. El mayor problema está, eso sí, en que solo son compatibles con sus coches eléctricos. Quizá en el futuro cambie esta condición y pueda beneficiar a todos los usuarios de eléctricos, pero al menos por el momento no es así.
Y esto nos interesa porque NIO es una de las varias marcas chinas que llegarán a Europa a lo largo de los próximos meses. Y no solo tienen modelos de coche eléctrico con precios equilibrados y prestaciones interesantes, sino que efectivamente es un fabricante con uno de los mejores sistemas de carga de la batería. Pero no por la carga propiamente dicha, sino porque efectivamente simplifican todo el proceso haciendo un cambio completo de la batería para reducir los tiempos de espera.