El Volvo EX30 ya se ha convertido en un pilar crítico para la marca sueca, y así lo demuestran sus ventas. Vale que el Volvo EX60 debería ser un modelo aún más importante para ellos, porque vendrá a sustituir al XC60, que es su ‘top ventas’, pero será bastante más caro y quizá no llegue a un público tan amplio hasta dentro de varios años. Mientras tanto, el exitoso EX30 ya está siendo analizado en profundidad y se ha podido comprobar que la versión básica es la mejor si lo que buscamos es la máxima autonomía y, además, un destacable nivel de eficiencia energética.
Bjørn Nyland ha analizado la versión básica con tracción trasera y la ha podido comparar, en su prueba de autonomía, con el Volvo EX30 Performance, que es una configuración que entre otras cosas cuenta con tracción a las cuatro ruedas. El modelo básico usa una batería de 69 kWh de capacidad de almacenamiento energético –aquí más sobre él– y con llantas de 20 pulgadas. Es, en realidad, la configuración Core con un motor eléctrico y de rango extendido.
No llega al nivel del Tesla Model Y, pero el Volvo EX30 ‘básico’ con batería de 69 kWh destaca por su eficiencia
La prueba se llevó a cabo a 22 ºC, una temperatura idónea. Una de las diferencias clave está en que la configuración con tracción trasera pesa 1.920 kg y, sin embargo, el mismo modelo con tracción total pesa 2.020 kg. Que puede parecer una diferencia escasa, pero es suficiente para que tengan una gran diferencia en eficiencia energética. A 90 km/h consiguió una autonomía de 414 kilómetros con el Volvo EX30 RWD 69 kWh, y un consumo energético de 15,8 kWh/km. Haciendo lo mismo, con la unidad con tracción total se fue hasta los 18,3 kWh/100 km y logró una autonomía de 357 kilómetros.
Y es que hay que entender que, cuando hablamos de coches eléctricos, las versiones más potentes suelen tener menos autonomía no solo cuando se exprime su rendimiento, sino también haciendo exactamente el mismo uso porque lo habitual es que sean más pesados y notablemente menos eficientes. De hecho, a 120 km/h pudo hacer 297 km de autonomía en la unidad con un motor, consumiendo 22 kWh/100 km y experimentando por tanto un aumento del 39%. Con el tracción total hizo 267 km de autonomía registrando un consumo de 24,5 kWh/100 km, un aumento en este caso del 35,4%.
Pero es que anteriormente el mismo probador también analizó la versión Performance del modelo, como te contaba anteriormente, y consiguió un 16% menos de autonomía que con la configuración con tracción simple. Eso a 90 km/h, mientras que a 120 km/h se quedó en torno a un 11% por debajo que estas cifras de autonomía. Por eso te comentaba anteriormente que, efectivamente, en el caso del Volvo EX30, salvo que la autonomía y el consumo no nos resulten relevantes, la versión básica –por su sistema de tracción- y de la mano de la batería de 69 kWh de capacidad, es la mejor que hay disponible dentro de la gama.
Ya te comenté, en mi opinión sobre el Volvo EX30, que se trata de uno de los mejores coches eléctricos que existen en estos momentos, tanto fuera como dentro de su segmento. Tiene un precio competitivo, buen equipamiento tecnológico, gran autonomía y un sistema de carga rápido. Además combina esto con un interior de alta calidad, algo en lo que Volvo ha venido siendo destacable también en otros muchos modelos a lo largo de los últimos años.