Con el BMW Z4 Concept, la firma bávara ha hecho una demostración de intenciones evidente. El BMW Z4, su próximo modelo roadster, está desarrollado de forma conjunta con Toyota. El modelo que preparan los japoneses, y que hemos podido ver en fotos espía, es el Toyota Supra. Según lo que sabemos, Toyota usará los motores de BMW, pero no es lo único que van a compartir. Sin embargo, BMW asegura que su modelo será completamente distinto al Supra que está a punto de lanzar Toyota.
Cuando dos modelos se desarrollan de forma conjunta, por parte de fabricantes diferentes, en muchas ocasiones vemos cómo únicamente cambia la carrocería, pero la experiencia de conducción e incluso el interior nos hacen sentir que estamos en el mismo coche con ‘distinta carcasa’. En ese sentido van dirigidas las declaraciones de un portavoz de BMW, apuntando a que ‘BMW Z4 y Toyota Supra serán modelos completamente distintos’, a pesar de que ya sabemos que tendrán una importante cantidad de elementos en común.
No habrá una versión ‘M’ del BMW Z4, según han adelantado desde la propia marca. Obligaría a hacer demasiados cambios, y a un precio excesivamente elevado.
BMW Z4 y Toyota Supra ¿el mismo coche?
Van a compartir plataforma, y además el Toyota Supra montará motores de BMW. Pero desde la firma bávara ya han adelantado que su Z4 será ‘un producto único, como cabría esperar de BMW’. Y se han referido especialmente a la experiencia de conducción, pero también al diseño de la carrocería, e incluso al diseño del interior de su nuevo roadster deportivo. Respecto al prototipo que han estrenado ya, por cierto, aseguran que es algo ‘muy cercano al modelo de producción final’ que veremos a comienzos del próximo año.
La información que tenemos apunta a un 2.0 Turbo como versión de acceso, con 180 CV de potencia aproximadamente. Por encima, el s30i con sus 250 CV. Y más allá, el 340i como versión ‘top’ del BMW Z4, que alcanzará los 320 CV de potencia aproximadamente. Y en este, con motor de seis cilindros en línea, parece que tendremos la opción de instalar el Competition Package para darle 40 CV más de potencia a su bloque equipado con cambio manual de seis velocidades, o bien una transmisión automática ZF de ocho velocidades.
Pero no vamos a ver más que esto. No habrá una versión ‘M’, según han adelantado desde la firma bávara, porque esto obligaría a hacer demasiados cambios sobre el modelo roadster, e inevitablemente aumentaría su precio de forma considerable. Parece que para el roadster BMW no ha encontrado motivos suficientes que justifiquen una versión superior a la que, por muy poco, se quedará por debajo de los 400 CV de potencia.
