El efecto submarino, en el coche es la consecuencia de llevar mal puesto el cinturón de seguridad y consiste en que, al sufrir un accidente de tráfico, el cuerpo se desliza por debajo del cinturón de seguridad. Eso se traduce en un importante riesgo de lesiones, porque aumenta enormemente el riesgo de que choquemos contra el volante con la cara o el pecho, y de que choquemos con las rodillas o las piernas contra elementos interiores del vehículo. Así que vamos a ver, además de qué es el efecto submarino, cómo evitarlo.
Si tienes dudas puedes revisar la efectividad del cinturón de seguridad, pero ya te aviso que es el elemento de seguridad pasiva más importante. Sin embargo, para que el cinturón de seguridad haga su trabajo correctamente es crítico colocárselo bien. De lo contrario podemos sufrir el temido efecto submarino que, como avanzábamos, puede provocar serias lesiones en caso de accidente de tráfico. Para evitarlo hay que hacer algo tan sencillo como colocarse correctamente el cinturón de seguridad; ahora bien, hay muchos conductores que no saben cómo hay que ponerlo exactamente, así que vamos a detallarlo.
La clave está en colocárselo bien
La parte superior del cinturón de seguridad debería ubicarse entre el cuello y el hombro, y nunca estar posicionado directamente sobre el cuello. Para ello podemos ajustar como es debido la altura del asiento, la inclinación del respaldo del asiento y también la altura del propio cinturón de seguridad. Todos estos ajustes, salvo la inclinación, es posible que nuestro vehículo no los incorpore porque, en ocasiones, forman parte de determinados acabados o del equipamiento opcional de un determinado coche.
La banda diagonal del cinturón de seguridad se debe colocar bien centrada en el pecho, nunca se debe sacar por uno de los hombros porque no detendrá nuestro cuerpo en caso de una fuerte detención –por un frenazo- o en caso de que se dé una colisión frontal. La banda inferior, por su parte, se debe colocar siempre sobre el abdomen. Y no se debería colocar sobre ninguna de las bandas del cinturón ningún tipo de elemento que, aunque puede ser más confortable, y evitar que se nos irrite el cuello –por ejemplo-, podría hacer que nuestro cuerpo se deslice en el que, como comentábamos, se conoce como efecto submarino.
Siguiendo estos consejos anteriores nos habremos colocado correctamente el cinturón de seguridad y de este modo funcionará como debe. Es decir, que reduciremos los riesgos de que se produzca el efecto submarino casi a cero. Por este mismo motivo también se recomienda no conducir con demasiadas prendas; es decir, evitar el uso del grandes abrigos durante la conducción, por ejemplo, que además de aumentar el riesgo de efecto submarino pueden dificultar nuestras maniobras y el control del vehículo.