Conocido como líquido anticongelante, y como líquido anticongelante, es un fluido crítico para el motor de tu coche. ¿Por qué? Porque es el que se encarga de que la temperatura del motor sea siempre la perfecta, no más de 90 ºC en la mayoría de los coches. El caso es que, como quizá habrás visto en alguna ocasión, este líquido tiene un color llamativo. Y no, no es el mismo en todos los coches. Los hay azul, lo hay rosa, lo podemos encontrar amarillo y en otros coches es verde. Y es importante conocer cuál es el significado del color del líquido refrigerante porque, aunque luego te explicaré el porqué, no hay que mezclarlos bajo ningún concepto.
El motivo que explica los diferentes colores que existen entre los líquidos anticongelantes está en su composición. Y es que todos ellos están compuestos por una proporción distinta de agua destilada y anticongelante, además de otros aditivos que son los que garantizan que no se produzca corrosión en el circuito de refrigeración del motor. La diferencia de color que existe entre unos líquidos refrigerantes y otros es, precisamente, la proporción que existe en la mezcla entre agua destilada y líquido anticongelante.
Los colores de los líquidos anticongelantes
El líquido refrigerante amarillo es el que más agua destilada tiene, y menos anticongelante, mientras que el refrigerante rosa lleva la mayor proporción de anticongelante.
- Líquido refrigerante rosa: 50% de agua destilada y 50% de anticongelante.
- Líquido refrigerante verde: 60% de agua destilada y 40% de anticongelante.
- Líquido refrigerante azul: 70% de agua destilada y 30% de anticongelante.
- Líquido refrigerante amarillo: 80% de agua destilada y 20% de anticongelante.
Aunque todos los colores de líquido refrigerante cumplen de forma correcta la función de absorción del calor del motor, es importante conocer que el azul es el más eficiente en esta tarea. Es decir, que se considera que el líquido refrigerante azul es el de mayor calidad. Por eso lo suelen usar coches de altas prestaciones, aunque el rosa es el que se encuentra de forma más frecuente. El azul es el segundo más habitual, el verde el tercero y el líquido refrigerante amarillo es el que se usa con menor frecuencia.
Es importante que sepas que no se deben mezclar colores de líquido refrigerante. Si tenemos que rellenar el vaso de expansión, para que el circuito de refrigeración se mantenga en su nivel óptimo de líquido, entonces deberíamos usar siempre el mismo color de líquido anticongelante. ¿Por qué? Porque en caso de mezclar colores podemos tener problemas como, por ejemplo, que aparezca la oxidación. Lo más habitual es que la sustitución del líquido anticongelante se haga en el cambio de la correa de distribución, tras 100.000 kilómetros.
Si utilizamos el coche con poca frecuencia, en lugar de esperar a los 100.000 kilómetros es habitual que se tenga que sustituir cada cuatro años, aproximadamente. Ahora bien, esto es la sustitución del líquido refrigerante, pero mucho antes es posible que tengamos que rellenar el circuito con una mayor o menor cantidad del mismo líquido que ya haya en su interior. Lo mejor es recurrir al manual del propietario, o al manual de mantenimiento, que es donde el fabricante suele detallar cuál es el líquido refrigerante recomendado para el motor de nuestro vehículo.