En el ‘Día de la Batería’, pero del año 2020, Tesla habló de que estaban trabajando en un nuevo proceso de fabricación de baterías por el que conseguirían reducir los costes de una forma muy significativa y, además, mejorar notablemente el rendimiento de las mismas. Hablaron en aquel entonces de que las baterías 4680 tendrían un ánodo de silicio, en lugar del habitual de grafito, y un nuevo proceso de fabricación de cátodo seco que permitiría reducir el precio a la mitad al tiempo que se consiguen baterías con un ciclo de vida mucho más extenso que el que ofrecen a día de hoy las baterías para coches eléctricos.
Este proceso de fabricación de cátodo seco es considerado el ‘santo grial’ de las baterías de iones de litio, y es el motivo principal por el que Tesla, en el año 2019, compró Maxwell. Esta compañía usó la tecnología a la que nos referimos para la fabricación de supercondensadores. Sin embargo, la compañía encabezada por Elon Musk consideró que el concepto se podría llevar al proceso de fabricación de sus baterías. Pues bien, después de dos años, Tesla vendió el negocio de supercondensadores que adquirió al quedarse con Maxwell, pero se quedaron con tecnología de electrodo de batería seca (DBE) y lo mantienen a día de hoy. Ahora bien, también es cierto que, aunque se prometía que sería en las celdas 4680 en las que se introduciría esta nueva tecnología, finalmente no fue así. Hace no demasiado tiempo, en julio del año 2021, Elon Musk publicó en la red social Twitter que ‘el electrodo seco es una pieza clave para reducir los costes de las baterías de iones de litio’, entre otras muchas piezas del rompecabezas.
Tesla está más cerca que nunca de conseguir baterías a mitad de precio gracias a la tecnología de electrodo seco para baterías
Ahora se ha podido saber que Tesla está más cerca que nunca de lograr que esta tecnología funcione como ellos esperen y, efectivamente, tengan a su disposición baterías a mitad de precio para coches eléctricos. En enero se conoció la solicitud de dos patentes relacionadas con la tecnología DBE; una de ellas relacionada con las películas de electrodos secos y aglutinantes no fibrilizables en micropartículas para la mejora de la vida útil de las baterías. Y la otra, relativa a nuevos aglutinantes de electrodos que son capaces de soportar voltajes operativos más altos sin sufrir un rápido proceso de degradación.
Ahora la USPTO ha publicado dos nuevas solicitudes de patente que ha presentado Tesla en relación a la tecnología DBE. Según se ha podido conocer, una de ellas tiene que ver con mezclas de metal elemental y carbono para dispositivos de almacenamiento de energía, que incluye una película de electrodo seco. Esta película comprende las partículas de carbono y metal de litio elemental; las partículas de carbono son porosas y, junto a una capa de interfaz de electrolito sólido, se cubren las partes expuestas del metal de litio elemental.
Y la segunda de estas dos últimas solicitudes corresponde a un nuevo método de preparación más conveniente para compuestos químicos relacionados con los aditivos electrolíticos. Esta mejora se ha demostrado que es capaz de prolongar significativamente la vida útil de las celdas de iones de litio. Son patentes, tanto la una como la otra, que se presentaron durante los meses de junio y agosto del pasado año 2022. Es decir, registros muy recientes que dan evidencia de que la compañía está muy activa en el desarrollo de importantes mejoras que afectan a las baterías de iones de litio.
También hace muy poco tiempo se pudo saber que Tesla ha instalado dos prensas gigantes en la sección de fabricación de baterías en Giga Austin. Dos prensas con una capacidad tres veces superior a la que necesita a día de hoy Tesla para prensar las materias primas que utilizan. Pero es que además, en la gigafábrica de Nevada la compañía está preparando una nueva línea de producción que indica con bastante claridad que la compañía está haciendo los pasos previos para aumentar la producción de celdas 4680. Al parecer, la compañía ya habría superado todos los retos que le proponía la tecnología DBE, y esto significaría un gran avance tecnológico que llegará muy pronto a las baterías de iones de litio.