BYD amplía la garantía, 8 años ó 250.000 km para la batería de todos sus eléctricos

BYD amplía la garantía de la batería de sus vehículos a 8 años ó 250.000 kilómetros. Una mejora para sus nuevos clientes, pero que también aplica con retroactividad a los que ya tuvieran un modelo de su gama. Afecta tanto a eléctricos como a híbridos enchufables.

BYD ha anunciado una mejora de la garantía que afecta a todos sus coches eléctricos. No solo a los que se vendan a partir de la fecha de este anuncio oficial, sino además con carácter retroactivo. Es decir, que todos sus clientes que tengan un vehículo eléctrico de BYD anterior a esta fecha disfrutan de las mismas condiciones de garantía para la batería LFP Blade.

La ampliación de la garantía implica ahora cobertura de hasta 8 años ó 250.000 kilómetros, con un SoH -estado de salud- del 70% como mínimo. Y es importante destacar que estas condiciones se aplican no solo a la batería de sus eléctricos puros, sino a toda su gama de enchufables; es decir, también a los modelos con mecánica híbrida enchufable.

La garantía de la batería de BYD, ahora es de 8 años ó 250.000 kilómetros

Como en la garantía de la batería de cualquier vehículo eléctrico, 8 años ó 250.000 kilómetros quiere decir que la cobertura aplica a lo que antes ocurra de estas dos condiciones. Por otro lado, en los modelos de BYD la garantía anticorrosión sigue siendo de 12 años sin límite de kilometraje y la garantía de la unidad de tracción se mantiene en 8 años ó 150.000 kilómetros. La unidad de tracción está compuesta por el sistema de propulsión y su controlador.

En lo que se refiere a la garantía general del vehículo, también se mantiene como hasta ahora con 6 años ó 150.000 kilómetros. Y no está de más recordar que no es la primera vez que BYD mejora las condiciones para sus actuales y nuevos clientes, porque el año pasado redujeron la frecuencia de los mantenimientos para todos sus vehículos. Algo sobre lo que hay muchas quejas de los clientes con las marcas tradicionales.

Los coches eléctricos han demostrado que, por su menor complejidad mecánica, no necesitan de un mantenimiento tan frecuente, no sufren de tantas averías, y tampoco generan un gasto tan elevado en mantenerse adecuadamente. Ese cambio de 2024 en las condiciones de BYD lo demuestra, y este nuevo demuestra que las baterías son más duraderas y fiables de lo que muchos siguen creyendo.

Las baterías LFP destacan por su vida útil

La Blade Battery que utilizan los coches eléctricos de BYD es una batería de química LFP. Es uno de los principales tipos que existen, junto con las baterías NCM. Y estas baterías NCM es verdad que tienen una menor densidad energética y que, por lo general, suelen ofrecer una potencia de carga algo más limitada –con la excepción del XPENG G6-. Sin embargo, presentan importantes ventajas en seguridad y vida útil.

Las baterías LFP son más resistentes a cargas y descargas profundas. Es decir, que no sufren de degradación prematura, como las NCM, por descargarlas hasta el 0% del SoC o cargarlas hasta el 100%. Eso hace que sean más aprovechables, o aprovechables en un rango más amplio. Y además, como te digo, ofrecen por norma general una vida útil más extensa tanto en ciclos de carga como en kilómetros de uso.