La bicicleta eléctrica se está convirtiendo, poco a poco, en el vehículo personal favorito de más personas. Y es normal, porque tienen un precio razonable, una buena autonomía y, en definitiva, es un buen vehículo para desplazarse al trabajo y otras tareas. Pero tarde o temprano cualquiera de ellas dejará de funcionar y nos obligará a comprar otra. El caso que nos ocupa, de la bici eléctrica Roetz Life, es diferente porque tiene un exclusivo diseño modular que está planteado específicamente para durar para siempre.
Esta bici eléctrica nace por un motivo muy concreto. En Países Bajos la bicicleta es un vehículo mayoritario y además desde hace ya muchos años. De hecho, hay más bicicletas que ciudadanos, y poco a poco se están enfrentando a un problema de residuos con estas bicicletas. El caso es que esta tendencia ha provocado un problema, y es que no tienen dónde meter –por así decirlo- las bicicletas que caen en desuso. Así que han decido idear una bicicleta eléctrica para durar siempre, y para ello han decidido desarrollar un exclusivo diseño modular con una calidad extraordinaria. Y sí, habrá componentes que se deterioren y dejen de ser útiles, pero para eso el diseño modular permite sustituir módulos concretos.
Así es la Roetz Life, la primera bicicleta modular diseñada para durar toda la vida
La Roetz Life es la primera bicicleta modular pensada y diseñada para durar para toda la vida. ¿De qué modo han conseguido esto? En ningún momento hay que tirar la bicicleta ‘a la basura’, porque todos los componentes que tienen desgaste se pueden sustituir de forma independiente. Así que en todo momento se pueden reemplazar solo elementos clave de la bicicleta y, además, es más barato de este modo.
No solo es innovador el diseño modular de componentes, sino que también han innovado introduciendo un sistema de monitorización en tiempo real de todos y cada uno de los componentes. Es decir, que igual que ocurre en un coche moderno, en el display de la bicicleta eléctrica nos aparece en cualquier momento la información detallada sobre cualquier tipo de avería que pueda estar afectando a cualquiera de los componentes de la Roetz Life. Este sistema es tan complejo y avanzado que puede avisarnos de fallos en la transmisión o el motor, e incluso alertarnos de que la presión de un neumático está más baja de lo debido.
Pero además de estas innovaciones en cuanto al diseño o la tecnología, hay otras muchas características interesantes en esta bicicleta eléctrica modular. Por ejemplo, su sofisticado módulo de transmisión de siete velocidades o su sistema de transmisión por correa. Que no solo hace que la conducción sea más suave, sino que también garantiza que la frecuencia de las averías sea menor y, por lo tanto, simplifica enormemente el mantenimiento de la Roetz Life. Como puedes ver, todo está pensado y diseñado al milímetro en esta bicicleta eléctrica.
La Roetz Life se puede comprar por 3.375 euros, pero también existe la opción de pagar desde 86 euros al mes durante un plazo de 12 a 36 meses como máximo. No es una bicicleta eléctrica barata, pero la realidad es que la innovación se paga. Por otro lado, no deja de ser una bicicleta eléctrica que ofrece una gran autonomía de 180 kilómetros como máximo en su configuración con batería de 840 Wh, que es la más ‘completa’ y tiene un precio de 350 euros adicionales. Esta versión, eso sí, anuncia una horquilla de 90 a 180 kilómetros de autonomía que variará en función del uso y el modo de asistencia que se utilice.
La otra opción es la ‘básica’, que viene equipada con una batería de 500 Wh, que ya es una capacidad de almacenamiento energética muy buena. Tanto es así que anuncia una autonomía de entre 60 y 120 kilómetros, que es el máximo que suelen ofrecer las bicicletas eléctricas con este precio. Y sin embargo, en esta opción tenemos además ese exclusivo diseño modular que hace que pueda durarnos para toda la vida. Ya se puede reservar por 100 euros, aunque las primeras unidades empezarán a llegar a comienzos del próximo año 2023 y con un descuento del 10% para los primeros clientes tanto en la cuota mensual como en el pago directo.