Aunque ha pasado más o menos desapercibido, resulta que el BYD Seagull, que se ha estrenado en el Salón del Automóvil de Shanghái 2023, cuenta con dos versiones de 30 kWh y 38 kWh. Pero es que la primera de estas dos, y eso es en lo que parece que no ha reparado todo el mundo, es una batería de sodio. Este es el primer coche eléctrico en el que vamos a ver instalada de fábrica una batería de sodio de BYD, y es la que nos ha dejado saber qué autonomía pueden ofrecer.

Esta primera batería de sodio de BYD tiene una capacidad de almacenamiento energético de 30 kWh; es decir, que es muy pequeña. Con esta batería es capaz de alcanzar los 305 km de autonomía, aunque según el ciclo de homologación CLTC asiático, que es más generoso que el WLTP en el que nos basamos en Europa. Y esto ¿qué implica respecto a una batería LFP? Pues, en realidad, lo tenemos fácil porque el mismo BYD Seagull tiene otra versión con batería de 38 kWh, pero que es de tipo LFP. En este caso, la autonomía en CLTC es de 405 km. Ya veremos cuáles son los datos de autonomía bajo el ciclo de homologación WLTP, pero mientras tanto son los que tenemos disponibles.

La batería de sodio frente a la LFP, es mucho más barata pero ¿qué tal es la autonomía que puede ofrecer?

Siguiendo los datos de este mismo modelo, y sin que la marca haya revelado la densidad energética gravimétrica y volumétrica, lo que sí podemos saber es que la batería LFP en este coche es capaz de ofrecer unos 10,6 km/kWh. Y sin embargo, la batería de sodio se queda en unos 10,16 km/kWh. Lo único que hay que hacer para llegar a estos datos es dividir la autonomía entre la capacidad de almacenamiento energético, y es un dato bastante relevante porque hablamos de exactamente el mismo coche.

Al ser el mismo coche no entran en juego variables como la eficiencia energética del motor o la aerodinámica, por ejemplo. Insisto, es el mismo coche pero en un caso con una nueva batería de sodio y en el otro caso con una batería convencional de química LFP. Y sorprende, porque la nueva batería de sodio solo ofrece 0,44 km de autonomía menos por cada kWh de capacidad de almacenamiento energético, así que parece que han logrado una densidad energética bastante buena.

Estamos deseando que BYD ofrezca más detalles técnicos sobre esta nueva batería, de la cual suponemos que se ha conseguido una buena densidad energética a nivel de paquete, y a pesar de que a nivel de celda es inferior a una LFP, entre otras cosas por su diseño ‘Blade’ con celdas patentadas por el propio fabricante. Por eso, y porque el BYD Seagull se asienta sobre la e-platform 3.0 que es compatible con baterías ‘Cell to Body’Tiene todas y cada una de las innovaciones con que cuentan también el BYD Dolphin, el Seal o el Atto 3, entre algunos otros que forman parte del catálogo de la marca asiática.

Esto anterior, de las baterías CTB, quiere decir que no hay módulos sino que las celdas van integradas directamente en el chasis del coche. De este modo se consigue un mejor aprovechamiento del volumen a nivel energético, que en definitiva es una mejor densidad energética. Sin duda, los datos que tenemos ahora mismo son de lo más prometedores para las baterías de sodio. Que, entre otras cosas, son las que han permitido que en China este modelo cueste tan solo 10.500 euros. Ahora queda ver también en qué cifras de autonomía se convierten estos datos al pasar por el ciclo de homologación WLTP.

Por cierto, que aunque el BYD Seagull se haya estrenado en China por tan solo 10.500 euros, ya se está empezando a hablar de su llegada a España. Y hay quienes aseguran que podría costar 15.000 euros, pero nosotros ya hemos hablado de nuestra apuesta de precio del BYD Seagull en España y es un dato bien distinto.