El escándalo de las emisiones ha sido una piedra en el camino de la alemana, pero Volkswagen sigue preparando varios modelos después de haber cancelado el Golf R400, y algunos de ellos serán para completar su gama SUV. Habrá al menos uno entre el Tiguan y el Touareg, y como no podía ser de otra manera Remco Design ya se ha dado prisa en enseñarnos cómo sería el que ha decidido llamar Volkswagen CrossBlue.
¿Por qué? En primer lugar, porque hay hueco en el mercado para un planteamiento como este, es decir, un modelo entre el Tiguan y el Touareg que cumpla exactamente con eso, algo a medio camino. Y además porque, por otro lado, Volkswagen ya ha mostrado sus prototipos sobre el Polo y el Golf, y ha comentado que estos son los pilares sobre los que se construirá una gama SUV más amplia, como ya están haciendo Audi o BMW, por ejemplo.
El Volkswagen CrossBlue, a medio camino entre el Tiguan y el Touareg
Para este, el Volkswagen CrossBlue, Remco Design apuesta por un diseño de líneas muy rectas. Demasiado, quizá, si echamos un vistazo al lenguaje del Tiguan y las líneas que se han trazado para el Touareg 2017 según su prototipo oficial. Ahora bien, a los diseñadores de este tipo de renders de vez en cuando ‘se les va la cabeza’, y luego resulta que no están tan alejados de las intenciones de las marcas. Por lo tanto, tampoco tachemos este diseño de locura, porque nunca se sabe. Y sino sólo hay que mirar el Audi Q2, que poca similitud guarda con el resto de SUV de la alemana.
En cualquier caso, Remco tiene claro que se basaría en la plataforma MQB, y tiene todo el sentido del mundo porque es la que comparten muchos de los SUV del Grupo Volkswagen, y precisamente para eso está planteada. ¿Motorizaciones? Ni idea, aunque evidentemente compartiría mecánicas del Tiguan y el Touareg, y según Remco algo así veremos en el mercado para el próximo año 2018. Eso dice él.