El Nissan Z 2022 es el sucesor del Nissan 370Z, comercializado hasta finales del año 2020. Esta nueva generación de la saga de deportivos japoneses tiene un motor de tres litros de cubicaje, de seis cilindros en V y alcanza una potencia máxima de 405 CV. Mantiene rasgos clave como, por ejemplo, la tracción a las ruedas traseras. Además, está disponible tanto con cambio automático de nueve relaciones como con cambio manual de seis velocidades.
A nivel de diseño, el Nissan Z 2022 refleja lo que ya anticipó el concept car en el que se basa, y retoma rasgos clave de la saga de deportivos en años anteriores. Esta nueva generación, que no se venderá en España, ni en toda Europa, llega hasta los 405 CV y mantiene su motor de seis cilindros en V con tres litros de cubicaje. Tanto con el cambio manual, como con el automático, ofrece el sistema Launch Control para salidas desde parado con la máxima aceleración posible. Esto, no obstante, forma parte del equipamiento de los automáticos –todos ellos- y de los manuales con mayor cantidad de equipamiento. En el caso de los manuales, cuenta con un árbol de transmisión de fibra de carbono y un sistema electrónico para hacer el punta-tacón automático cuando se reduce de marcha.
Novedades en el Nissan Z 2022, ahora con 405 CV gracias a su motor V6
El Nissan Z ha mejorado de forma notable en el paso por curva, respecto al 370Z, por novedades técnicas como una mayor rigidez del chasis. Además, los neumáticos delanteros son más anchos que los anteriores, y se ha trabajado en la dirección para ofrecer una mayor precisión y unas sensaciones más naturales. Disponemos de solo dos modos de conducción en las configuraciones con cambio automático: Standard y Sport, siendo este segundo el que endurece la dirección, incrementa la respuesta en la aceleración y ofrece un sonido algo más deportivo.
En el interior, el Nissan Z 2022 se mantiene sencillo. Contamos con tres indicadores analógicos que nos dan información sobre la velocidad de giro del turbo, el voltaje de la batería y, por supuesto, la presión del turbo. Pero además, en esta consola central hay también una pantalla de ocho pulgadas. Detrás del volante, el cuadro de instrumentos es una pantalla de 12,3 pulgadas con tres configuraciones de visualización. En todas ellas se destaca especialmente el tacómetro. Este ha sido diseñado con la zona roja en la vertical, de tal modo que se ayude al conductor a hacer el cambio de velocidades en el momento óptimo.
En el interior del Nissan Z se ha trabajado también en detalles importantes como unos asientos deportivos con gran sujeción lateral, para evitar el desplazamiento lateral del cuerpo en el paso por curva. Se venderá en versiones Sport y Performance; la segunda de estas dos ofrece unos neumáticos delanteros 255/40 R19 que son más anchos, Launch Control si optamos por versión con cambio manual, alerón trasero para mejorar la estabilidad a grandes velocidades y diferencial autoblocante. En definitiva, es un producto que mantiene la evolución continuista que necesitaba la gama y que, al paso, mejora las claves que el en el Nissan 370Z daban lugar a una posible mejora.