Siguen las negociaciones para tratar si finalmente Renault será motorista de McLaren, o no, y ahora todo ha dado un giro. Renault ha dado el sí a McLaren, y abandonarán a Toro Rosso según esta negociación, pero van a exigir a la ‘segunda’ de Red Bull algo a cambio: Carlos Sainz en su equipo. Este es el trato que quieren cerrar con Toro Rosso, que inevitablemente montaría motores de Honda.
En Monza, el movimiento entre los hospitalities de McLaren y Renault ha sido frenético. No hay nada oficial por el momento, pero se ha podido conocer que Renault ha dado el sí a McLaren. Es decir, que el fabricante francés sí quiere montar su unidad de potencia en el monoplaza que conducirá Fernando Alonso. Ahora bien, quedan cabos abiertos con Toro Rosso, porque el acuerdo con los de Woking deja sin motorista a la segunda de Red Bull.
Renault quiere llevarse a Carlos Sainz de Toro Rosso, o que paguen los 12 millones que se ahorrarán por la salida del proveedor francés de propulsores.
McLaren Renault ocurrirá en 2018, a priori, según las intenciones de ambas partes. Tanto Renault como McLaren están satisfechas con las condiciones pactadas entre ellas, pero la francesa ha introducido un nuevo factor a tener en cuenta: su relación con Toro Rosso. Motorizar los monoplazas de McLaren supone abandonar a Toro Rosso, pero en esta jugada quieren llevarse a Carlos Sainz a su alineación.
Toda esta situación hace que el horizonte para Fernando Alonso sea idóneo. El piloto español no tiene interés en que McLaren Honda continúe existiendo y provocando problemas a su carrera. Así que este acuerdo beneficiaría a Renault, a McLaren, a Carlos Sainz y a Fernando Alonso de forma especial. Y Honda, al fin y al cabo, no tendría que quedarse a orillas de la Fórmula 1 por falta de equipo al que proveer de motores.
La situación en estos momentos está en que sí, Renault quiere poner sus motores en los McLaren, y de esta forma dejar a un lado su acuerdo con Toro Rosso porque la FIA sólo les permite tener un máximo de tres clientes. Por lo tanto, Honda pondría sus motores en Toro Rosso y se desplazaría a un ala más discreta de la Fórmula 1. Ahora bien, con la oportunidad de seguir desarrollando su mecánica en ‘segunda fila’, y más adelante convertirse en el proveedor de Red Bull si la evolución de su propulsor así lo permite. Quizá, en torno a 2019 ó 2020.
Pero Renault no quiere irse de Toro Rosso con las manos vacías, sino que en toda esta negociación han pedido llevarse a Carlos Sainz. Eso, o que Toro Rosso pague la compensación de 12 millones de euros que van a ahorrarse ahora, sin el suministro de los propulsores de los franceses. Al mismo tiempo, como es evidente, llevarse a Carlos Sainz a Renault implicaría sacar a Robert Kubica o a Nico Hülkenberg del puesto en uno de los monoplazas de Renault para el próximo año.