Yo siempre había tenido neumáticos de invierno en todos mis coches, y lo cierto es que cada año intento ir a Andorra en invierno porque adoro el esquí, y allí es donde más me gusta esquiar. Con el tiempo fui empezando a obsesionarme con los neumáticos M+S, que se llaman así porque supuestamente trabajan bien con ‘Mud and Snow’, que es barro y nieve. Y a priori deberían ser suficientes para circular por carreteras nevadas en muchas circunstancias. Pero, por mi experiencia, no son tan buenos como parecen.
Lo primero que te diré es que un neumático M+S no es un neumático de invierno. Vamos, que estos M+S tienen unas ciertas capacidades en hielo y nieve, superiores a las del típico neumático de verano convencional, pero esas capacidades son limitadas. Y como te estoy contando, yo he podido experimentar que las capacidades son más limitadas de lo que creía. Es peligroso generalizar porque no conozco todos los neumáticos M+S, pero te estoy hablando de la experiencia personal que yo he tenido con los neumáticos Michelin Crossclimate que ha calzado mi vehículo más reciente. Ya no los tengo, pero porque ya no tengo el vehículo.
Ni M+S, ni nada. Eran igual de malos que unos neumáticos de verano cualquiera
Al tratarse de una furgoneta mediana, que como te he contado en varias ocasiones la tenía camperizada, han sido varias veces las que hemos ido por caminos de tierra y, además, también a Andorra a esquiar. Vamos, que los he probado justo en los dos escenarios en los que, a priori, se deberían haber comportado mejor que los neumáticos de verano que he llevado siempre en todos mis coches anteriores. Y en ‘campo’ sí que se sentían algo mejores que unos neumáticos de verano convencionales.
Los Michelin Crossclimate que te digo que yo llevaba, tenían algo más de tracción con tierra suelta, pero poco más. La diferencia apenas era notable y, desde luego, no me haría pagar más por este tipo de neumático en ningún caso, si es que acaso hubiera diferencia de precio a la hora de cambiarlos. Me refiero a que, visto lo visto, no pagaría más por unos M+S que por unos neumáticos normales, si este es el rendimiento que dan todos ellos.
Y como te decía antes, en nieve es donde me he llevado las mayores decepciones. Cualquiera que haya ido a esquiar a Andorra sabrá que allí las carreteras están siempre limpias de nieve, es realmente raro encontrarse con que no haya pasado una máquina antes que tú para asegurarse de que el asfalto esté limpio y seguro. Vamos, que los neumáticos M+S tampoco tuvieron que someterse a ningún esfuerzo especialmente grande. Y sin embargo, tenían las mismas pérdidas de adherencia que un neumático de verano convencional. De hecho, en las arrancadas aparcado me sorprendieron porque se saturaban rápidamente de la poca nieve que había en el suelo, y perdían la tracción por completo igual que los neumáticos de verano que he tenido siempre.
Y con todo esto no quiero decirte que todos los neumáticos M+S sean malos, pero sí que para mí la experiencia fue decepcionante a más no poder. Conozco a gente que ha tenido buena experiencia con este tipo de neumáticos, y supongo que será porque hay algunos mejores que otros, como en todo. Pero vamos, que yo tenía una gran confianza en ellos y me demostraron que no merecen la pena en absoluto. Al menos el modelo que te cuento que he tenido durante el tiempo que ha estado conmigo esa furgoneta camperizada. Quizá más adelante tenga ganas de darle la oportunidad a algún otro neumático M+S, ya veremos.