Sí, otro capítulo más tras el incidente tan desagradable del Gran Premio de Fórmula 1 de Azerbaiyán . Tras las declaraciones que veíamos ayer de Hamilton y Niki Lauda, en un tono un tanto agresivo , ahora es el turno de la contrarréplica de Sebastian Vettel. El piloto de Ferrari, tetracampeón del mundo con Red Bull y líder del mundial, se ha pronunciado por fin sobre el tema. Aunque debemos de decir que lo ha hecho con una evasiva, fiel a su estilo laxo fuera de la pista.
Sebastian Vettel por fin se ha dado cuenta, o eso parece, de que se ha equivocado. Ha declarado que sí, ahora está “listo para hablar con Hamilton”. Vettel es consciente de que su maniobra es sucia, no hay nada que la justifique y que puede perjudicarle gravemente de cara al mundial. Los nuevos dueños de Liberty Media quieren renovar la imagen de la Fórmula 1 y precisamente no de esta forma. A los estadounidenses que mandan ahora en los Grandes Premios les encanta el espectáculo, pero no el dantesco.
Vettel sabe que está en desventaja, Hamilton tiene las de ganar.
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Sin embargo, quien tiene la ventaja ahora mismo es Hamilton. Que el piloto número 1 de Ferrari quedase por delante suya en Bakú no es sino por mala suerte. El Mercedes F1 W08 se siente, se pilota y ofrece mejor ritmo que el Ferrari SF70H. Además, Hamilton es todo un experto en la guerra psicológica. Se curtió con Fernando Alonso y Nico Rosberg.
«Vettel no puede llamarme, no tiene mi número»
Hamilton espera un reconocimiento público de los errores de Vettel, mientras tanto, esperará a hablar en pista, como él mismo ha dicho. “Vettel quiere aclararlo conmigo, pero no puede llamarme, en parte porque no tiene mi número”. Esta guerra psicológica es terreno nuevo para Vettel, que ya perdió con Ricciardo en 2014. La temporada parece aún más interesante.