Ayer conocíamos cómo Sebastian Vettel se libraba de la sanción que todo el mundo creía que le caería por el incidente en el Gran Premio de Azerbaiyán. Sin embargo, en una maniobra bastante caciquil y de proteger a su piloto más mimado, la FIA dejó sin sanción a Vettel de forma vergonzosa. Pero ¿Y si no es así?
Retraigámonos un poco en el tiempo, hasta 2008. Concretamente al Gran Premio de Singapur ¿Veis ya por dónde voy? Efectivamente, el llamado Crashgate. El Renault R28 de Fernando Alonso iba como un auténtico tiro ese fin de semana (y fue el mejor coche ese último tercio del campeonato). Se preveía una pole position como un castillo de grande. Pero el Renault se rompió y Alonso saldría desde atrás.
Vettel podría ser sancionado de forma velada
Todo lo posterior es de sobra conocido. La remontada de Alonso, el choque de Nelsinho Piquet, la salida del Safety Car, los olvidados otros Safety Car que casi arruinaron la remontada de Fernando… Pero todo acabó con una victoria, extremadamente sucia para algunos, que luego repetiría en Japón. El año siguiente se desató todo durante la guerra entre la FIA y el triunvirato de Renault, McLaren y Ferrari. Desde entonces, se ha barrido en caso de duda al lado opuesto de Alonso, que solía ser el Red Bull y Vettel. Y desde la guerra del posible campeonato paralelo, ni Renault, ni McLaren ni Ferrari han tocado los laureles de la gloria. Vettel, en cambio, ha ganado 4 campeonatos desde entonces.
Vettel no debe olvidar las sanciones en B de la FIA
Pero sigamos retrocediendo. En 2007 ocurrió algo que todos recordamos. El patrón del automovilismo español, Sanganchao, se apareció en el Gran Premio de China. El milagro necesario para que Alonso pudiera ganar el Mundial estaba ahí. ¿Recordamos ahora las palabras de Ron Dennis? “Corremos contra Alonso”. Acabó ganando Kimi Raikkonen y McLaren se libró de pagar bastante de la sanción que se le había impuesto por el caso de espionaje a Ferrari. La cábala se comenta sola.
Por todo esto, teniendo en cuenta que si Vettel ganase el Mundial de Fórmula 1 sería un entorchado manchado, podría quedarse sin ganarlo “misteriosamente”. A Ferrari le esperan sanciones por usar más motores de los debidos. Habrá que estar al tanto de lo que ocurra en pista. Vettel tiene motivos de sobra para preocuparse.