Aquello de que Red Bull te da alas… parece que se va a cumplir también en la Fórmula 1, porque Renault va a volar del nido. El que ahora es proveedor de motores de McLaren, con un compromiso para los próximos tres años, no va a renovar con Red Bull cuando se termine el acuerdo que tienen firmado. Es decir, que en 2019 Red Bull se quedará sin los motores de Renault, y a estas alturas lo que suena con más fuerza es la posibilidad de Red Bull Honda. Tienen un año para probar y desarrollar las mecánicas de Honda en los monoplaza de Toro Rosso.
La ruputura de McLaren Honda ha provocado que, en 2018, Toro Rosso Honda sea la nueva alianza ya sin los motores de Renault, que evidentemente pasarán a propulsar el monoplaza de McLaren. Y se habló antes de que esto fuese -casi- oficial de la posibilidad de que Red Bull fuese ‘preparando’ a Honda en Toro Rosso para, poco más adelante, utilizar el motor de los japoneses en su primer equipo. Finalmente, esto se tendrá que hacer pero por ‘obligación’. Al menos por la parte que le toca a Renault, porque no renovarán cuando concluya su acuerdo en 2018.
Renault no tiene intención de renovar con Red Bull. Tienen un contrato firmado hasta finales de 2018.
Red Bull también se queda sin Renault, pero en 2019
Ahora que Toro Rosso se ha quedado sin Renault, que se va a motorizar McLaren en 2018, el ‘segundo equipo’ de la bebida energética tendrá que lidiar con Honda y sus problemas. La idea, o eso se comentaba según filtraciones internas, es que Toro Rosso se encargase de apoyar el desarrollo de Honda durante una o más temporadas. Y que si la evolución era positiva, finalmente los propulsores de los japoneses se montasen en Red Bull, pero más adelante. Esto, evidentemente, habría dejado a Renault apartada a un lado, pero por parte y voluntad del primer equipo de Red Bull.
Y finalmente será Renault quien dé la espalda a Red Bull, porque no tienen intención de renovar con Red Bull cuando se termine su contrato con fecha hasta finales de 2018. Por lo tanto, Red Bull tendría como única opción, al menos por el momento, quedarse con los motores de Honda con sólo un año de ‘rodaje’ dentro de su segundo equipo: Toro Rosso.