Durante ocho años, el Gobierno ha estado actualizando el Plan PIVE hasta el actual, con una aportación conjunta de 1.500 euros de descuento en la compra de coches nuevos. La mitad la ha aportado el Gobierno, y la otra mitad el concesionario, y para este tipo de compras entregando un coche usado con al menos una década y su documentación en regla. Pero esta semana, el Plan PIVE 8 se acaba.
A la mayoría de los compradores de coche nuevo les ha afectado exactamente de esta manera, con una bonificación de 1.500 euros a su favor tras entregar un vehículo usado con al menos diez años de antigüedad, aunque con su documentación al día. ¿Por qué? Porque estos vehículos se dan de baja, y al mismo tiempo, porque la idea era renovar los vehículos en pro de coches más ‘limpios’. Sin embargo, el hecho de que tengamos un gobierno en funciones no permite una nueva prórroga, a pesar de que ciertas marcas mantendrán sus descuentos por cuenta propia, sin aportaciones del Estado.
El Plan PIVE 8 se acaba, aunque podría volver más adelante
Actualmente el sector está en crecimiento y en los últimos meses se han alcanzado máximos en el volumen de ventas que no se registraban desde hace prácticamente una década, antes de la crisis –más o menos-. Y en ello es cierto que han puesto de su parte las empresas, pero también los particulares compran más coches nuevos en los últimos meses, algo a lo que también ha contribuido el Plan PIVE 8. Por lo tanto, es evidente que el PIVE interesa a todos, tanto a fabricantes y concesionarios como a consumidores.
De momento, como adelantábamos no se sabrá si hay prórroga mientras haya un gobierno en funciones, pero se plantea la posibilidad de que próximamente se relance el Plan PIVE en una novena edición, a pesar de que el Plan MOVEA pretende ser la evolución de estas subvenciones en la compra de vehículos nuevos. Lo que sí está claro, porque ya hay anuncios de promociones con PIVE pasado el 31 de julio, es que algunas marcas mantendrán los descuentos. Pero como ya decíamos, no sabemos por cuanto tiempo, y evidentemente lo harán sin aportaciones del Estado.