El litio es un material crítico para la fabricación de las baterías de coches eléctricos; y el petróleo lo es para el combustible de los vehículos con motor térmico. Pues bien, aunque siempre ha parecido que el litio y el petróleo pudieran ser antagonistas, la realidad es que han conseguido sacar litio de los pozos de petróleo. Ha sido la empresa E3 Lithium la que, por el momento, ya lo ha probado con éxito en dos pozos de petróleo. Y lo mejor de todo es que es un proceso que necesita de menos agua y tiene una menor huella de carbono que los procesos habituales para la obtención de litio.
A día de hoy, la mayor parte del litio que se produce a lo largo y ancho de todo el mundo procede de salares, que son cuencas desiertas formadas por acumulación de agua subterránea salina. Y por supuesto, también hay una importante parte que proviene de depósitos de minerales de roca dura. No obstante, la mayor parte se obtiene a partir de salmueras porque resulta mucho más barato que los depósitos minerales. La diferencia está en que los depósitos pueden requerir de un gasto hasta cuatro veces mayor. Y la clave en este proceso de E3 Lithium está en que se utilizan los mismos pozos petróliferos de los que se está extrayendo el petróleo para conseguir litio para las baterías de coches eléctricos. Las salmueras se someten a bombeo y evaporación para la obtención de litio, haciendo que se cristalicen y produciendo la carbonatación para la obtención de sal de hidróxido o carbonato que en otro paso adicional se convierte en el litio que se usa para las baterías.
El Petrolitio puede ‘cambiar el juego’: obtienen litio para baterías de coches eléctricos a partir de pozos de petróleo
Aunque aún está bajo investigación, E3 Lithium está avanzando a pasos agigantados en el desarrollo de una tecnología que se basa en extraer litio de pozos de petróleo y de gas. En la producción de petróleo se usan grandes cantidades de agua: el petróleo se sustituye por una salmuera de agua salada, que se considera agua residual y suele devolverse al pozo por tener una concentración de petróleo inferior al 1%. En Norteamérica se estima que por cada unidad de petróleo y gas que se produce se bombean hasta cinco unidades de salmuera; que, aunque tiene una concentración de petróleo muy baja, contiene carbonato de litio en un 95% o incluso más. Y es a partir de aquí donde aparece el petrolitio.
Esta idea es viable porque se están haciendo grandes avances en los procesos de tratamiento de aguas residuales, así como también en la extracción de salmueras. Es por eso por lo que el petrolitio, que no deja de ser la obtención de litio a partir de perforaciones petrolíferas, es una opción viable. Y la apuesta por esta tecnología tiene algunas ventajas muy relevantes como, por ejemplo, que se vayan a poder reutilizar infraestructuras empleadas para la extracción de petróleo en la obtención de litio, además de que se puedan mantener puestos de trabajo. Y por supuesto, aumentar la disponibilidad de litio y desde países que no tenían litio hasta la fecha.
En los últimos años estamos viendo que la disponibilidad de litio es bastante limitada y que, además, está en manos de unos pocos países. Lo denominan el oro blanco precisamente porque el desarrollo de la industria del automóvil está en manos de este material, y es escaso. Ya se está planteando el despliegue de varias minas en Europa, pero lo cierto es que abrir una mina de litio es un proceso lento y que, sobre todo, requiere de todo tipo de burocracia. Y aprovechar las instalaciones que hay de extracción de petróleo para la producción de litio podría suponer un cambio radical en la situación que estamos viviendo.
Son varias las compañías que están desarrollando esta tecnología, y están encontrando que es más económico y rápido poner la infraestructura en torno al petróleo a trabajar también en el litio que abrir nuevas minas de extracción de litio. Y sobre todo que, como comentábamos anteriormente, hay países que sí son ricos en petróleo y que, sin embargo, no tienen ningún yacimiento de litio. Con esta tecnología, sin embargo, sí que tendrían disponibles sus propias instalaciones desde las que producir litio para baterías de coches eléctricos.