Si hay algo en lo que Tesla ha conseguido destacar con respecto a las marcas tradicionales, en la fabricación de coches eléctricos, es en encontrar las técnicas adecuadas para llevar a cabo una drástica reducción de costes de producción. Eso es precisamente lo que les ha permitido pasarse todo el último año bajando precios constantemente y poniendo las cosas cada vez más difíciles a las marcas ‘de siempre’. Pues las cosas van a cambiar, porque Hyundai prepara un cambio revolucionario que, a ellos también, les va a permitir hacer coches eléctricos mucho más baratos que los de ahora.
Y en realidad no se trata de una innovación propia como tal, sino más bien de ‘copiar’ lo bueno que ha hecho Tesla hasta ahora. Según un informe que llega de Corea del Sur, la marca está ultimando su nuevo proceso de producción denominado ‘Hiperfusión’, y que efectivamente se basa en el Giga Casting de Tesla, para aumentar su capacidad de producción y, sobre todo, para reducir los costes de fabricación de forma significativa. Pero ¿qué quiere decir todo esto? Pues que, simplificado lo máximo que se puede, lo que va a hacer Hyundai es transformar el proceso de producción de sus coches eléctricos para basarse en un método de inyección de aleación de aluminio fundido en moldes con una configuración de piezas mucho más grandes.
El revolucionario cambio de Hyundai para lograr coches eléctricos mucho más baratos que los actuales, esto es lo que preparan
Tesla introdujo este innovador proceso de producción en la fábrica de Fremont en el año 2020, y más adelante lo ha llevado a sus plantas de producción en China y en Alemania. Consiste en la utilización de enormes máquinas que actúan como moldes de fundición y son inyectados con aleación de aluminio para fabricar piezas mucho más grandes de las que hasta ahora había fabricado la industria del automóvil. Esto lo que consigue es ahorrar tiempo de una forma significativa y también reducir los recursos necesarios. En definitiva, reducir costes de producción de una forma muy notable.
¿Por qué? Porque fabricar más piezas, y más pequeñas, implica dedicar más tiempo y dinero en unir estos componentes. A la compañía de la que hablamos, Tesla, le ha permitido reducir los costes un 30% con respecto a las técnicas habituales de la industria. Pero es que además de suponer un enorme ahorro, también es algo que beneficia al peso final de los vehículos eléctricos. Y esto, como ya sabemos, también juega en favor de la eficiencia, de poder usar baterías más pequeñas –por su capacidad de almacenamiento energético- y, por tanto, de ahorrar costes también en este apartado. Y la batería, no lo olvidemos, es la pieza más cara en un coche eléctrico.
Los métodos que ha usado la industria tradicionalmente suponen tener que perforar miles de agujeros en unas 70 placas de acero y hacer soldaduras de forma individual. Un proceso mucho más ineficiente y costoso que, con esta técnica, desaparece. Y aunque Tesla ha sido la pionera en estas técnicas de producción, Hyundai va a seguir el mismo camino para impulsar su producción de coches eléctricos. Con ello van a conseguir que sus coches eléctricos sean mucho más baratos que los actuales, y pondrá a la compañía coreana en una posición mucho más competitiva. Están avanzando de mejor forma que las marcas tradicionales europeas.
Hyundai ya tiene previsto contar con su propia planta de fundición, procesamiento y ensamblaje, aunque según la información disponible no será hasta el año 2026 cuando puedan arrancar con esta técnica de producción. Y la buena noticia es que Hyundai no es la única que está detrás de este innovador proceso de producción, sino que también compañías como Toyota, Volkswagen y Volvo están trabajando a marchas forzadas para implementar en sus fábricas procesos parecidos. Hay un fabricante chino, que es Geely, la dueña de Volvo, de Polestar y de Link & Co, que ya ha desarrollado este método para la producción de modelos de Zeekr. Una marca que, por cierto, próximamente venderá sus coches eléctricos en Europa.