Ahora mismo, Hyundai mantiene en su gama de modelos tanto coches eléctricos como vehículos con mecánica térmica de altas prestaciones. Así que, aunque planean plantearse como uno de los fabricantes líderes en la electrificación, saben bien qué le gusta a los conductores puristas de coches gasolina. Y así lo demuestra su última patente: un vibrador que, a grandes rasgos, tratará de hacer que conducir un coche eléctrico sea más parecido a conducir un gasolina.
Hyundai tiene la intención de seguir contentando a los compradores de coches térmicos –tanto gasolina como diésel-, incluso aunque se pasen al coche eléctrico. Por eso han solicitado una patente en la que se detalla un sistema que simula el ralentí, que simula también los cambios de marcha y que es capaz de imitar también las sensaciones que da un coche gasolina en la parada y el arranque. Para ello se sirve del sistema de audio, de señales visuales y de un vibrador instalado junto al pedal del acelerador en sus coches eléctricos. Una maravilla.
Hyundai quiere dar las sensaciones de un gasolina en sus coches eléctricos
En la documentación de la patente, Hyundai señala que las personas que están acostumbradas a conducir un vehículo con motor gasolina, o diésel, se pueden ‘aburrir por la ausencia de motor térmico, transmisión, embrague’ y otros elementos cuando compra un coche eléctrico. Por eso, desde la compañía coreana consideran que podría ser interesante ofrecer una función que se encargue de simular las características de la conducción de un vehículo con motor térmico. En definitiva, quieren ofrecer en sus coches eléctricos algunas de las sensaciones que ofrece un coche gasolina.
Y en realidad, Hyundai no es la única que ha considerado un sistema como este, sino que Toyota también está desarrollando una tecnología que va en la misma línea. En concreto, Toyota ha patentado un cambio manual para coches eléctricos. Que no es lo mismo, pero también es una tecnología enfocada a ofrecer en coches eléctricos algunas de las sensaciones a las que estamos acostumbrados por los vehículos gasolina y diésel.
La tecnología patentada por Hyundai, sin embargo, es un sistema de vibración que simule las vibraciones que produce al ralentí un vehículo térmico, pero que se vaya incrementando de forma gradual a medida que acelera el conductor, y llegando a generar un cambio de marcha virtual. Además, según se describe en la patente el conjunto de hardware y software sería capaz de simular distintos tipos de motor de combustión interna. Tanto es así que está previsto que esta tecnología pueda simular un motor atmosférico y uno turboalimentado. Es algo realmente interesante, efectivamente, para los amantes de la mecánica y la conducción de vehículos térmicos.
Y aunque en las imágenes descriptivas de la patente se prevé un sistema de ocho relaciones, según la documentación el número de marchas se podría configurar por el propio conductor, además de que la vibración en su intensidad y forma, y el sonido del motor, serían todo parámetros con una cantidad casi infinita de posibilidades de personalización. De momento no se ha dado información oficial sobre el posible lanzamiento de esta tecnología, pero al menos Hyundai ha dado un importante primer paso patentando su tecnología.