Ferrari, como el resto de equipos, está preparando su monoplaza de F1 de 2018. Y ahora mismo tienen el foco puesto en la potencia de su propulsor; durante el año pasado Mercedes lideró el campeonato con escasa diferencia, pero sirvió para llevar algo de ventaja. Ahora, ambos luchan por los 1.000 CV, y Ferrari dice haber conseguido tal nivel de potencia.
El año pasado Mercedes presumía de haber llegado a los 900 CV extraídos del motor V6 Turbo híbrido de su monoplaza. Y a lo largo de la temporada hubo una gran igualdad entre Mercedes y Ferrari, pero los alemanes ganaron en términos de rendimiento por 15 CV aproximadamente. Esta temporada, los dos tendrán más potencia, y están luchando por estar en 1.000 CV de partida.
Ferrari y Mercedes luchan por tener 1.000 CV en sus monoplazas de Fórmula 1 de 2018
Ferrari ha señalado de forma oficial que ya han conseguido 1.000 CV de potencia sacados de su propulsor revisado para esta temporada, pero que por el momento este nivel se ha alcanzado en los bancos de potencia. Algo que ya comentó Mercedes señalándose cerca de los 1.000 CV en pista.
De momento, peso y potencia son las claves en el desarrollo del monoplaza de Ferrari para 2018. Una de las ventajas de Mercedes, frente a los italianos, es que su coche pesaba menos. Ferrari habría estado trabajando en ese aspecto, según comentan fuentes fiables, y la parte aerodinámica ha dado un paso adelante también.
Aunque Ferrari ha alcanzado los 1.000 CV de potencia de pico en sus pruebas, por el momento son datos teóricos. Los test en Barcelona, la penúltima semana de febrero, y como parte de la pretemporada, dirán cuál es la situación real. En cualquier caso, si han mejorado potencia y peso, y la respuesta aerodinámica de su monoplaza, Mercedes podría tenerlo bastante más difícil durante este año.