En los próximos meses van a ser varias las marcas de coches chinos que llegarán a Europa, entre las cuales destacan BYD y NIO. Sin embargo, aquí en Europa, y en concreto en España, ya se están vendiendo coches eléctricos –y térmicos, y también híbridos- de algunos fabricantes chinos como es el caso de MG. Morris Garage nació en Gran Bretaña, pero a día de hoy tiene propietarios chinos y es un buen ejemplo de cómo el coche eléctrico chino está calando en Europa.
Morris Garage, más conocida ahora como MG, ha conseguido entrar en el mercado europeo con relativa facilidad. A lo largo de los últimos años han sido muchas las marcas chinas de vehículos que lo han intentado y han fracasado, como por ejemplo Qoros en el año 2013. Los fabricantes chinos tienen algunas dificultades para vender sus productos en el Viejo Continente. Es un mercado muy difícil, y buena prueba de ello es Ford, con una cuota de mercado de tan solo el 4% o incluso Toyota, que es el fabricante líder a nivel mundial y aquí solo tienen un 6% del mercado.
A pesar de las dificultades que entraña el mercado europeo, han sido muchas las marcas de origen chino que han intentado calar aquí y las siguientes que han ido viniendo tienen mucha más experiencia. No solo por los intentos de las que han fracasado, sino también porque durante muchos años China ha tenido blindado su sector del automóvil. ¿De qué manera? Cualquier marca de coches que quisiera instalarse en China para llevar a cabo allí la fabricación y comercialización de sus modelos ha tenido que hacerlo estableciendo una empresa conjunta con un fabricante local.
Precisamente por eso SAIC, la compañía propietaria de MG, ha estado asociada con Volkswagen en China desde 1984. Esta política de China, en este sector en concreto, ha servido para que las empresas locales hayan podido adquirir la experiencia de los especializados fabricantes europeos. En definitiva, China ha abierto su mercado tan solo de manera parcial, y enfocando sus políticas a nutrir sus propias empresas de la tecnología y el conocimiento de los fabricantes extranjeros.
Ahora, sin embargo, hay muchas empresas chinas que han madurado enormemente en este sentido y están listas para salir a Europa. A una Europa que está fuertemente resentida por la aún vigente crisis de los microchips –también en manos de China-. Los fabricantes de automóviles europeos están priorizando sus modelos más rentables, así como sus configuraciones más rentables, y se está quedando una oportunidad de mercado en el segmento de los coches baratos.
Pero además, Europa está también viviendo un contexto en el que el coche eléctrico crece imparable y al ritmo que marca la normativa. Esto, continuando con lo que comentábamos anteriormente, deja una oportunidad de mercado para los coches eléctricos baratos. Los fabricantes de automóviles tradicionales no están siendo capaces de ofrecer exactamente esto, y es exactamente el objetivo de las marcas chinas. Y lo tienen bastante fácil, porque China domina la fabricación de baterías para coches eléctricos a nivel mundial.
Conociendo todo esto, algunas marcas chinas –más que otras- están adecuándose no solo al mercado europeo tradicional, sino también al contexto puntual que está viviendo. Y sin duda, MG es prueba de ello. También es una de las marcas de coches chinas que más fácil lo tiene, porque MG es propiedad de SAIC Motor, y a su vez SAIC Motor es propiedad del Gobierno de China.
Y ahondando aún más en el caso de éxito específico de MG en Europa, uno de los detonantes es su relación con los concesionarios. En el New York Times cuentan cómo un representante de MG se acercó a un concesionario de Ford en la ciudad de Unterpleichfeld (en Alemania) para que empezasen a vender sus modelos. Detallan que el representante de MG le indicó que, a diferencia de lo que exigen otras marcas de automóviles, MG ‘no les obliga a pagar los coches por adelantado’, sino que tienen una política distinta –y mucho más beneficiosa para el concesionario- que es comisionar por venta cerrada.
¿Qué quiere decir esto? Que a un concesionario, la mayoría de las marcas de coches tradicionales le exige comprar los coches y asumir el riesgo de venderlos, o no venderlos. Y MG, sin embargo, cede los coches en exposición y solo cierra la comisión que corresponda en caso de venta. Por eso, el concesionario se puede arriesgar a exponerlo y que no se venda. Sin embargo, cuentan también en el NYT que los coches se vendieron rápidamente tanto por sus precios baratos como por ofrecer unos tiempos de entrega menores en el contexto de la crisis de los microchips.
Y su entrada en el mercado europeo MG la ha hecho, sobre todo, con su MG ZS térmico que es un coche sencillo, pero muy barato y con un buen equipamiento. Sin embargo, ahora que ya tienen un mínimo reconocimiento y una mínima presencia en nuestro mercado, lo próximo es el MG 4 Electric. Ahora sí, un coche eléctrico, y que aunque no es realmente barato, sí que es más barato que sus rivales europeos tradicionales. Una demostración de que, efectivamente, China va a atacar de lleno el segmento de los coches eléctricos baratos. Hay demanda, y China está a punto de aterrizar con fuerza para darnos la oferta.